El declive natural de los pozos y la crisis mundial del sector por el freno que provocó la pandemia, que hizo caer el precio del barril, convergieron para que Mendoza cerrara el 2020 con el nivel de producción de crudo más bajo desde 1999, cuando comenzó a registrarse el volumen extraído. En consecuencia, la Provincia perdió casi $3.000 millones en concepto de regalías en comparación con 2019.
Según estadísticas del Ministerio de Energía de la Nación, en 2020 se produjeron 2.277.041 m3 de crudo en nuestra provincia, lo que significó una retracción del 14,9% con relación a 2017 y una baja del 35,4% respecto a la producción media histórica de 3.522.826 m3. Gran parte de la caída tuvo que ver con el inédito escenario económico del año pasado, pero es cierto también que los niveles de producción se encuentran en tendencia negativa desde 2011.
El sector tuvo un leve repunte en 2016, cuando logró superar los 3 millones de m³, después de cinco años de caídas consecutivas, pero desde entonces no logra pasar la barrera de los 2,9 millones de m³ de extracción y a la fecha se encuentra muy por debajo de ese volumen.
Cabe destacar que, de acuerdo con el Ministerio de Economía de la provincia, entre explotación directa y actividades vinculadas, el sector de hidrocarburos representa 25% del Producto Bruto Geográfico de Mendoza. De allí que caídas tan significativas en la producción preocupen especialmente a las autoridades locales.
A eso se suma, además, la incidencia del sector sobre el Presupuesto provincial. De acuerdo a las estadísticas publicadas por Administración Tributaria Mendoza (ATM), en 2020 las petroleras pagaron $7.766,1 millones en concepto de regalías, lo que significó una caída real del 27,5% con relación a lo que habían tributado en 2019 ($7.548,6 millones).
De hecho, si se hace una comparación considerando el efecto de la inflación, se concluye que Mendoza dejó de ganar $2.952,9 millones en concepto de regalías el año pasado, como consecuencia directa de la baja de producción y la caída del precio internacional del barril de crudo.
Las causas de la baja
“El sector petrolero convencional tiene una declinación natural de entre el 7% y el 8%, que se puede revertir en la medida que renovemos las reservas y logremos compromisos de inversión firmes”, explicó Emilio Guiñazú Fader, subsecretario de Energía y Minería de la provincia.
No obstante, las inversiones se regulan en función de los precios y de las perspectivas de aumento de demanda, factores que durante 2020 se mostraron deprimidos. “Puntualmente, por un desequilibrio de oferta y demanda, la tendencia es que los precios van declinando y es menos rentable la nueva exploración. A largo plazo, se reducen las reservas y la producción”, agregó el funcionario.
“El mundo tomó la decisión de irse hacia matrices energéticas libres de carbono” y más temprano que tarde la provincia se verá afectada.
“El último fue un año fuera de la curva, pero en el contexto general tenemos que ser creativos generando incentivos para atraer inversiones. Es un sector que en 15 o 20 años va a tener un peso específico menor al actual, aunque no va a desaparecer, porque es muy grande y tenemos una refinería”, pronosticó Guiñazú.
El mayor potencial para el sector hidrocarburífero en Mendoza se ubica en el Sur, concretamente en Pata Mora. “Tenemos que darle más competitividad a los yacimientos de esa región”, señaló el funcionario y destacó que se está buscando también aumentar el rendimiento de la explotación petrolera ya existente. Esto implica la aplicación de tecnología para aumentar el índice de recuperación primaria de los yacimientos en declive.
“La otra opción es el crudo no convencional de Vaca Muerta”, agregó el subsecretario. Para ello, se trabaja en el desarrollo del Polo Industrial de Pata Mora, a fin de evitar posibles problemas de infraestructura y lograr una “explotación de forma continua del no convencional en esa zona”.
Perspectivas
Mal pronóstico de los economistas
El valor del crudo en Argentina se define en función del precio del barril Brent en Europa, que el año pasado tocó valores mínimos históricos (ahora se recuperó, llegando a U$S57,55). La Administración de Información Energética de EEUU estima que, a nivel global, el consumo de combustibles líquidos alcanzó los 80,6 millones de barriles por día en abril de 2020, cuando la pandemia estaba en su punto más severo alrededor del mundo, y se recuperó a 95,5 millones de barriles diarios en diciembre.
“En Mendoza la producción cayó más porque ya venía con tendencia decreciente, con pozos con menor rendimiento y con inversiones que no alcanzan para mantener estable la producción. En Argentina, la única provincia que vuelve a la situación anterior a la pandemia es Neuquén por el impulso de Vaca Muerta”, explicó Jorge Day, economista del Ieral (Fundación Mediterránea). El economista Daniel Garro consideró que por el tipo de cambio atrasado es difícil que se estimule la producción y cuando termine 2021, “se seguirá viendo una declinación en la producción petrolera de Mendoza”.
2.277.041
A la baja. En 2020 según los datos del Ministerio de Energía de la Nación se extrajeron del subsuelo mendocino 2.277.041 m3, o sea 35,4% por debajo de la media histórica.