Aunque los momentos de alta incertidumbre suelen paralizar al inversor, que prefiere esperar a que el panorama se aclare para no equivocarse, también sabe aprovechar oportunidades. Desde el sector inmobiliario comentan que las ventas de inmuebles se activaron en la previa de las PASO y nuevamente ahora con la cercanía de las elecciones presidenciales, ya que las propiedades tienen un bajo precio en dólares y se anticipa una devaluación.
Estanislao Puelles Milán, vicepresidente del Consejo Federal de Colegios Inmobiliarios de la República Argentina, comentó que, a partir de junio empezaron a ver un aumento considerable en la compraventa de propiedades. Esto, en contraste con el bajo nivel de los meses anteriores. A mediados de año, precisó, se registró un aumento de las consultas y en julio empezaron a cerrarse operaciones.
En cuanto a los motivos de esta reactivación del mercado, indicó que hay dos. Por un lado, hay que remitirse muchos años hacia atrás para ver valores tan bajos en dólares. Detalló que es lo mismo que viene pasando en la construcción, que el precio del metro cuadrado en dólares está en uno de sus niveles históricos inferiores.
Así, departamentos que valían US$ 80 mil, hoy tienen un precio de US$ 45 a 50 mil; uno que no tenían desde hace 20 años y que consideró muy interesante para quien cuenta con ahorros en la divisa norteamericana.
Por otra parte, analizó que muchos anticipan que, después de las elecciones, el dólar va a subir, lo que ha llevado a que, en los últimos tres meses, haya habido un aumento no sólo de consultas, sino de cierre de operaciones; en especial de departamentos pequeños o terrenos.
También comentó que le ha resultado llamativo que el comprador ya no se fija tanto en el precio del dólar y si subió $50, lo que para él implica que entienden que el mercado inmobiliario llegó a un piso. Y sumó que, a pesar del aumento reciente del dólar, las propiedades no han bajado y hay propuestas agresivas de compra.
Puelles indicó que quien invierte en un inmueble no está pensando tanto en la renta, sino en que entra con un precio bajo y espera capitalizarse a futuro; como ya sucedió después de 2002, que los valores en dólares se recuperaron. De todos modos, indicó que la rentabilidad de los alquileres ha mejorado desde el 2% al año del valor de la propiedad en moneda estadounidense, para ubicarse en el 3,5 al 4%.
El presidente de la Cámara Inmobiliaria de Mendoza, Roberto Irrera, coincidió en que, a pesar del momento complejo, ha habido un pequeño movimiento en el mercado de compraventa de inmuebles. Explicó que los compradores suelen ser personas que tienen miedo de lo que pueda pasar después de las elecciones y que el próximo Gobierno decida incautar los dólares o el dinero en plazo fijo.
Así, cuando el dólar blue sube, hay quienes considerar que “llegó el momento de solidificar” y deciden invertir en una propiedad, con el conocimiento de que, a largo plazo, siempre esa inversión de valoriza. Irrera detalló que se venden los inmuebles de US$ 35 a 45 mil, ya que son a los que se puede acceder con ahorros, o, en el otro extremo, los de alta gama, que no se ven tan afectados por la coyuntura.
Eduardo Rosta, presidente del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza, detalló que las ventas se han mantenido constantes. Sobre todo, de departamentos de uno y dos dormitorios, en edificios o complejos aptos para alquiler temporario u oficinas. Esto le ofrece al comprador un plan A y un plan B, mientras que, a medida que uno se aleja de la zona céntrica, las posibilidades se limitan al alquiler tradicional, con una rentabilidad más acotada.
En este sentido, resaltó que se da una situación paradójica y es que una persona que invierte $ 40 o 50 millones tiene una renta mensual de $100 a 120 mil; que es lo que logra con un par de millones en plazo fijo. Y subrayó que esto es lo que ha generado la ley de alquileres, además de que se haya desalentado la inversión.
En todo el país
“Sin dudas, este clima electoral ha revelado opciones de inversión atractivas, como inmuebles comerciales y alquileres temporales a turistas, proporcionando tasas de retorno superiores a lo esperado porque Argentina está barata para los turistas en moneda extranjera. Los proyectos en construcción de empresas reconocidas también ofrecen ganancias significativas, dependiendo de su avance y ubicación estratégica con constructoras de primera marca”, indicó Víctor Arlandi, presidente de Maxre Central.
Resaltó que hoy se está vendiendo por encima de los dos últimos buenos años (2017 y 2018), cuando hubo un “veranito de venta”, asociado al crédito hipotecario. “Está claro que gane quien gane las elecciones el panorama va a traer certezas y la compra retraída por incertidumbre va a aparecer y hacer subir ciertos precios de nichos de mercado específicos de alta gama. No todas las propiedades recuperarán valores por la alta oferta de invendidos y los que volverán a la venta retiradas de la venta actual aumentando la oferta”, desglosó.
En los próximos meses, se espera una combinación de actores que aprovechan el actual contexto y aquellos que se muestran cautelosos debido al ruido político generado por las elecciones. Para quienes forman parte del sector, la clave está en la adopción de estrategias flexibles y en mantenerse atentos a las tendencias políticas y económicas que puedan generar cambios futuros. Además, se enfatiza la necesidad de asesoramiento experto de profesionales matriculados y una evaluación cuidadosa de riesgos y oportunidades durante este período electoral.