El Ejecutivo enviará esta semana a la Legislatura un proyecto de modificación de la ley 9.002, que regula la constitución de personas jurídicas. El objetivo es actualizar la normativa para acelerar el proceso de creación de empresas, de manera que los inversores vean a Mendoza como una provincia amigable para invertir y que ofrece certezas.
El director general de Asuntos Gubernamentales de la provincia, Francisco Mondotte, explicó que la “Ley Orgánica de Personas Jurídicas y Registro Público” tiene siete años y se reformó por última vez en la gestión anterior del gobernador Alfredo Cornejo. Pese a eso, los avances tecnológicos, que se aceleraron durante la pandemia, han hecho que sea necesario modificar varias cuestiones, para que los procesos de constitución de empresas sean más ágiles. Sumó que no sólo se trata de facilitar la creación, sino también la realización de trámites, como el cambio de domicilio, el incremento de capital o la modificación de la estructura societaria.
Hasta 2015, detalló, todos los expedientes se realizaban en papel y, si bien se han ido incorporando innovaciones, se han aplicado en la gestión interna, pero no hacia afuera. Un ejemplo de esto es que, desde ese año, se han ido digitalizando todos los expedientes nuevos y que los que fueron presentados originalmente en papel, pero han tenido alguna adecuación, también se han ido pasando al formato digital.
Sin embargo, si los legisladores le dan aval a la propuesta, se podrá constituir cualquier tipo de sociedad en un plazo menor a las 48 horas. Mendoza, destacó Mondotte, ha registrado más de 12 mil SAS (Sociedad por Acciones Simplificada) en los últimos 5 años, lo que ha hecho que sea vista como un polo muy atractivo para las inversiones.
Pero ahora, esta facilidad de crear una empresa en un plazo tan corto -la idea es que sea en el mismo día en que se realiza el trámite- se extenderá no sólo a las SAS, sino a cualquier tipo societario, como la SRL (Sociedad de Responsabilidad Limitada) o la Sociedad de Capital e Industria.
Por otra parte, habrá formularios inteligentes. Es decir, de los que no permiten pasar a la siguiente etapa -o página- si no se ha completado la anterior, con lo que se busca garantizar que no falte ningún dato y que todos los declarados sean correctos (porque habrá cruce con otros organismos, como el Renaper), lo que ofrecerá certeza de que en menos de 48 horas se producirá la constitución de la sociedad.
El director general de Asuntos Gubernamentales añadió que también esperan que, en los próximos meses, la Dirección de Personas Jurídicas tenga un sistema de funcionamiento similar al del Registro de la Propiedad y que los escribanos, contadores y otros profesionales matriculados puedan consultar el estado de las sociedades en forma digital e inmediata.
Para entenderlo, contó que, ahora, si una persona acude a un escribano porque está interesado en comprar una propiedad a nombre de una sociedad anónima, para contactar al directorio, el profesional debe ingresar el pedido a la DPJ y la gestión demora un par de días (hábiles). “Todo tiene que ver con la digitalización”, precisó para explicar la importancia de estos cambios.
Asimismo, aunque habrá formularios modelos para constituir empresas, también existirá la posibilidad de que un profesional calificado -abogado, escribano o contador- presente una propuesta diferente. Esto podrá resultar útil para los casos de actividades muy específicas, que requieran de características puntuales en esa constitución, como puede ser el caso de la minería o el transporte; como también de grandes cadenas o de sociedades de capitales internacionales.
Así, habrá tres caminos para crear una empresa o una entidad: el tradicional, que es digital también, pero cuyo trámite pasará por asesores jurídicos y contables (que estiman será más utilizado por las asociaciones civiles sin fines de lucro); el de los formularios inteligentes, que permitirán completar la gestión en menos de 48 horas; y el de proponer un modelo a medida, que no será revisado por los asesores y calculan no será lo más habitual, por la responsabilidad legal que implica para los profesionales intervinientes.
Mondotte resaltó que esta iniciativa del Ejecutivo apunta a fortalecer la idea de que Mendoza es un lugar que favorece las inversiones, además de contar con una institucionalidad que brinda certezas.
Cornejo había adelantado, en su discurso en la Fiesta Nacional de la Ganadería de Zonas Áridas, que estaban trabajando en identificar todo tipo de trámites que compliquen el desempeño de las actividades privadas, para avanzar en la simplificación y desburocratización. Y que, en esta línea, enviarían a Legislatura un proyecto de ley para facilitar la creación de empresas.
El contador Mauricio Benvenutti, quien se dedica a la constitución de empresas, indicó que mejoró mucho el proceso con la pandemia, pero que está lejos de producirse en un día el alta. Por el contrario, lo más habitual es que demore unos 20 y explicó que la DPJ tiene varios asesores y no siempre comparten criterios, con lo que se puede usar un modelo y algunas veces pasa sin problemas y otras hay una objeción.
Si todo está bien, en dos o tres días sale la resolución -algo que se debe ir consultando, porque no suelen notificar la aprobación-, pero si hay observaciones, la respuesta al descargo o rectificación puede tomar un tiempo. Esto le sucedió en diciembre, cuando constituyó siete sociedades y le hicieron objeciones a una, y estuvo más de tres meses hasta lograr registrarla.
Benvenutti consideró que el formulario digital inteligente podría agilizar el trámite, pero sólo una parte, porque cuando la empresa está registrada en Personas Jurídicas, se debe enviar una copia digital certificada por escribana a AFIP, para comenzar otra gestión. Cuando se obtiene el alta en AFIP, se debe acudir a ATM (Administración Tributaria Mendoza) para tramitar Ingresos Brutos. Y recién cuando se cumplieron estos tres pasos consecutivos, se puede ir al banco a pedir la apertura de una cuenta.
Si bien entendió que se trata de reparticiones nacionales, provinciales y privadas, consideró que desde la DPJ podrían enviar el expediente electrónico a las otras y todas trabajar en simultáneo. El contador resaltó que, en Estados Unidos, hace 20 años que se puede crear una sociedad y abrir la cuenta en un mismo día, mientras él opta por decirles a sus clientes que el trámite toma un mes y prefiere sorprenderlos si la gestión está lista antes.