Los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) publicados este miércoles indican que la pobreza en el Gran Mendoza bajó en el primer semestre de 2022 a 38,6 %, un número menor al 44,6 % del segundo semestre de 2021. La reducción es un número alentador (esos 6 puntos menos son 54.000 personas menos en situación de pobreza), aunque en el Gran Mendoza todavía quedan 401.617 personas en esa situación y 47.479 en situación de indigencia.
En la comparación interanual de Mendoza, el primer semestre de 2022 también fue menor al de 2021, cuando se dio un 43,7 % de pobreza. En el segundo semestre del año pasado creció la pobreza (44,6%) y luego en los primeros meses de este año volvió a bajar. Es un misterio todavía cómo resultará el segundo semestre que se transita actualmente, con tres ministros de Economía distintos entre julio y septiembre y con incertidumbre económica en el corto plazo.
En la región cuyana, Mendoza presentó una pobreza medida por personas apenas superior al Gran San Luis (38,3 %) y unos puntos mayor al Gran San Juan (33,4 %). En cambio la indigencia en Menoza del 4,6 % fue inferior a la del Gran San Luis (4,8 %) y superior a la del Gran San Juan (3,2 %). Más allá de los números fríos, hay que recordar que las personas en situación de pobreza no llegan a la Canasta Básica Total y las que están en indigencia ni siquiera a la Canasta Básica de Alimentos.
Menor pobreza a nivel país
A nivel nacional, también se registró una baja en los indicadores de pobreza entre el primer semestre de 2022 y el anterior. La pobreza en Argentina pasó de 37,3 % a 36,5 % (10,6 millones de personas); mientras que la indigencia aumentó del 8,2 % al 8,8 % (2,6 millones de personas).
El informe de condiciones de vida del INDEC mide la incidencia de la pobreza y la indigencia en 31 aglomerados urbanos. A partir de indicadores semestrales seleccionados para aglomerados urbanos específicos, se busca contextualizar y facilitar la lectura de los resultados principales, ya que contienen información sobre la evolución de las canastas regionales, los ingresos de los hogares y las tasas de empleo.
En el documento oficial se analiza que, con respecto al segundo semestre de 2021, la incidencia de la pobreza registró una reducción de 0,2 puntos porcentuales (p.p.) en los hogares y de 0,8 p.p. en las personas. En cuanto a la indigencia, mostró un aumento de 0,7 p.p. en los hogares y de 0,6 p.p. en las personas. “A nivel regional se observó una reducción de la pobreza en la mayor parte de las regiones. La indigencia aumentó en tres regiones y disminuyó en las otras tres”, se puede leer.