Desde su concepción y los primeros dibujos en un plano a la actualidad, el proyecto ha logrado plasmar su personalidad y generar una marca diferencial en el mercado del real estate mendocino. Ha avanzando sobre el entorno natural para agregar valor a la calidad de vida en un complejo residencial. El desarrollo en El Challao reposa sobre numerosas condiciones fisiográficas, que fueron muy bien aprovechadas para diseñar vistas únicas: se construyó una pequeña laguna, un campo de deportes y distintos circuitos para disfrutar de los paseos por el piedemonte.
Julián Arroyo es el director del Mendoza Norte Country Club, una ambiciosa propuesta de 450 lotes que comenzó a ser proyectada en 2015. “Queremos construir el mejor lugar para vivir en Mendoza”, ha señalado cada vez que ha tenido una oportunidad para hacerlo. El complejo inmobiliario tiene a la vista aquellos atractivos necesarios para fundar la seguridad comercial. Su receptividad fue muy buena y el 80% de los lotes ya se han vendido y se planea a futuro.
Tras un año tan particular como lo fue 2020 por lo que significa el Covid-19 y las medidas preventivas, se aceleró la demanda de espacios más amplios y de los entornos naturales; “Durante la pandemia creció la demanda de los emprendimientos en los espacios abiertos. Mucha gente priorizó la calidad de vida. Comenzaron a llegar clientes de otras provincias, sobre todo de Buenos Aires”, señaló el director general del Mendoza Norte (MN).
El country incorporó a su paisaje uno de los más singulares campos de golf de la Argentina, además de numerosas áreas que han sido adaptadas a la comunidad residencial que lo rodea. A 10 minutos del centro, este espacio combina la calidad de la urbanización, la naturaleza y el deporte para generar su diferencial. “El proyecto de Mendoza Norte surgió de la idea de construir el mejor lugar para vivir en la provincia. El country reúne características que lo hacen único, por cómo está emplazado en la montaña, con amenities de alta calidad, y a pasos del centro de la ciudad. Nuestra propuesta es única”, sostiene sin dudas Julián Arroyo.
-¿Qué oportunidad tienen los country clubs en el mercado del real estate mendocino?
-Hoy más que nunca, a raíz de la pandemia, los country tienen un valor agregado porque ofrecen a los propietarios la posibilidad de poder realizar actividades al aire libre -de todo tipo- sin tener que salir del barrio. Por ejemplo, en Mendoza Norte uno puede hacer trekking, mountain bike, tenis, gym o golf sin subirse al auto para ir a otro lugar; realizar sus actividades dentro de un ambiente natural, de seguridad y con todos los protocolos correspondientes.
-¿Cuánto pesa para los potenciales propietarios que los amenities estén ligados al deporte?
-Es de suma importancia, sobre todo para el desarrollo de los niños. Hoy en día vivir en un ambiente saludable es de mucha importancia tanto para los adultos como para los niños. Es una tendencia que tiene cada vez más demanda. Inclusive se da el caso de propietarios que no realizaban deportes y, al tenerlos al alcance de la mano, comenzaron a realizar estas actividades, cambiando y mejorando su calidad de vida. De esto se trata. A su vez, esto también ayuda a la vida social dentro del country.
Entornos especiales
“Para nosotros, en realidad, el entorno es la combinación de vistas: mirás para un lado y estás rodeado de montañas; para el otro, está la ciudad”, comenta Arroyo.
-Entre las tres zonas residenciales, ¿de cuántos lotes es el complejo?
-Hoy en día estamos comercializando las tres etapas: Los Balcones (de escritura inmediata), Valle Sur (con una escrituración en 30 días) y Valle Norte (cuya infraestructura está prácticamente terminada). Entre los tres sectores que integran el complejo contamos con 450 lotes, de los cuales hemos vendido un 80%. Además de seguir a paso firme para entregar los distintos sectores, hemos empezado a desarrollar las futuras etapas del complejo.
-¿Qué nivel de demanda tienen las tres zonas? ¿Qué las hace diferentes entre sí?
-Depende de las necesidades, de los tiempos y del presupuesto de los potenciales propietarios. Lo bueno de MN es que tenemos una amplia gama de superficies y de precios, lo que nos hace muy competitivos porque logramos satisfacer las necesidades de los distintos tipos de clientes. Tenemos lotes para gente que desea construir en forma inmediata y también para aquellos que desean realizar una inversión segura y esperan por un muy buen rendimiento.
-En cuanto a la urbanización, ¿qué características tiene? ¿Cuánto influye el entorno natural?
-Un aspecto muy significativo de nuestra urbanización es, por un lado, que la superficie destinada a lotes no supera el 40% del total del predio, siendo el resto espacio verde, deportivo o de montaña. Buscamos un estilo de urbanización que respete la topografia y la aproveche, haciéndolo lo más sustentable posible. Otro concepto sobre el cual trabajamos la sustentabilidad es en el uso del agua, donde se realiza un aprovechamiento de las lluvias para el llenado de la laguna y el riego.
-¿Cuánto impactó en el mercado la escalada del dólar?
- Influyó mucho. Como se sabe, a raíz del aumento de la divisa, se produjo un movimiento especulativo que impactó en un principio en el valor de las propiedades. Todo esto ocasionó un revuelo en el mercado inmobiliario en donde aparecieron oportunidades para los tenedores de dólares, para invertir y construir. Esta situación comenzó a normalizarse en los últimos meses y los precios de a poco van volviendo a la normalidad.
El momento sigue siendo propicio para la inversión y la construcción de una casa, con lo cual se aprovecha el gran poder multiplicador de nuestra industria. Tenemos la capacidad para generar nuevos proyectos, así como también para dar empleo en volumen y de calidad.
-La pandemia y el encierro ¿aceleraron la demanda de los espacios más abiertos?
-Totalmente. No sólo de los mendocinos sino que comenzaron a llegar muchos clientes de otras provincias, sobre todo de Buenos Aires. Como se sabe, Mendoza es una provincia que se destaca por su calidad de vida y la pandemia puso este tema como una prioridad para mucha gente.
-¿Cuál es el promedio de metros cuadrados construidos en el country?
-Es muy variable. Se construyen casas desde 180 metros cuadrados en adelante y, debido a la diversidad en la tipología de lotes, los tamaños varían bastante.
-¿El proyecto de Mendoza Norte puede expandirse?
- El master plan contempla, además de las etapas en ejecución, la realización de un complejo de casas de montaña sobre el cual tenemos previsto el lanzamiento en un tiempo muy breve.