El Banco Central de la República Argentina (BCRA) desarrolló una nueva normativa que prohíbe a las empresas procesadoras de pagos ofrecer sus servicios a comercios y personas que figuren en la “Base de Contribuyentes No Confiables” de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), la ex-AFIP. Esta medida, que afecta a unos 20.000 a 30.000 contribuyentes con CUIT inhabilitados por irregularidades fiscales graves, fue anunciada a través de la Comunicación “A” 8144/2024, publicada el lunes en el Boletín Oficial.
La disposición prohíbe que los adquirentes o procesadoras de pagos presten servicios de cobro, como el uso de terminales de punto de venta (POS) o el procesamiento de pagos con tarjetas de débito, crédito, compra o prepagas, a aquellos que figuran en esta base. Según la normativa, las empresas deberán consultar semanalmente la base de datos de ARCA y, en caso de encontrar a un contribuyente en ella, suspender el servicio en un plazo máximo de un día hábil.
Hasta que ARCA implemente un sistema de notificaciones para facilitar esta tarea, el Banco Central desarrolló que las entidades financieras y los proveedores de servicios de pago (PSP) deberán actuar de manera preventiva, revisando la base semanalmente para identificar posibles infracciones.
La base de datos de ARCA
La “Base de Contribuyentes No Confiables” incluye a empresas y personas con CUIT inhabilitadas debido a graves incumplimientos fiscales, tales como la emisión de facturas falsas o el uso de documentos fiscales fraudulentos. En este sentido, fuentes del BCRA explicaron que, por ejemplo, aquellos que no pueden facturar, pero siguen realizando cobros a través de terminales POS, serán ahora bloqueados de estos servicios. “Hay que haber cometido una infracción severa para ser incluido en esta base de datos”, aseguró desde el organismo.
Por su parte, ARCA explica en su sitio web que los contribuyentes incluidos en la base tienen su CUIT limitado debido a irregularidades que no pudieron ser verificadas o comprobadas. En estos casos, se restringirá el uso de ciertos servicios hasta que la situación se regularice.
Críticas y preocupaciones
El anuncio no ha estado exento de controversia. Algunos tributaristas y contadores expresan su preocupación por las posibles interpretaciones discrecionales de la normativa. El tributarista Diego Fraga advirtió sobre el riesgo de que empleados de ARCA puedan incluir a contribuyentes en esta base sin una justificación clara, lo que podría limitarles su capacidad de realizar cobros. “Si un empleado de AFIP aprieta el botón y te manda a la base, no solo no vas a poder facturar, sino que tampoco te van a dejar cobrar mediante tarjetas”, dijo en su cuenta de X (ex-Twitter).
De manera similar, el contador Mariano Ghirardotti cuestionó la amplitud de la medida: “¿Qué significa ‘no confiable’? ¿Un contribuyente por no presentar tres declaraciones juradas de un impuesto se ve castigado anulando su cobranza bancaria?”, se preguntó, resaltando el potencial impacto de un control sistemático sobre los contribuyentes que podrían ser inhabilitados sin una causa probada.
Implicaciones de la medida
La resolución busca combatir las prácticas de evasión fiscal mediante el control más estricto sobre el uso de los sistemas de pago. Sin embargo, la falta de claridad sobre los criterios específicos para ser incluidos en la base de “Contribuyentes No Confiables” genera incertidumbre entre los profesionales del sector. De todos modos, desde el BCRA aseguran que la medida busca evitar que los contribuyentes con irregularidades continúen realizando cobros de manera ilegal a través de la red de pagos electrónicos.
Esta nueva normativa marca un giro significativo en la forma en que se monitorean las prácticas fiscales y podría tener un impacto importante en el sector de los pagos digitales, especialmente en un contexto donde la formalización de las transacciones electrónicas está en auge.