Los municipios –al igual que muchos este año- no la han tenido fácil este año frente al feroz ajuste realizado desde la Nación. Por este motivo, la mayoría tuvo que frenar o ralentizar obras así como ser muy cuidadosos con sus recursos para no desfinanciarse, sobrevivir y poder diseñar el año que viene. Aunque tanto la provincia como muchas comunas cuentan con una ley de responsabilidad fiscal que ha servido para no hundirse del todo frente a situaciones como la actual, hay puntos que mejorar así como un nuevo contexto nacional. En Mendoza se ha comenzado a discutir el reparto de recursos de la provincia a los municipios lo que ha generado posturas diversas entre los intendentes.
Más allá de cómo resulte esta negociación y qué se priorice en la pulseada, al parecer las municipalidades enfrentan como nunca antes la necesidad de ser súpereficientes con sus gastos. La falta de recursos extra obligaría a mayor transparencia así como claridad acerca de los objetivos y la relación equilibrada entre erogaciones e ingresos. El Consejo Empresario Mendocino (CEM) cuenta con un trabajo de las finanzas municipales 2011-2020 y está a punto de terminar una actualización de este. La temática atraviesa la coyuntura actual en el contexto del ajuste de recursos que ya no llegarán de la Nación y la necesidad de mantener algunas obras que se hacían con estos fondos.
Esto se suma al reclamo unificado del sector privado que tiene que ver con la disminución de la carga impositiva y en donde los municipios no son ajenos. En especial en lo que tiene relación no solo con el valor de las tasas sino con la burocracia que desalienta inversiones y sube costos. Mendoza posee una ley de Responsabilidad Fiscal que está a días de cumplir 20 años (N°7314) y aunque ha sido útil, parecer haber quedado corta. El presidente del CEM, Martín Clement, expresó que dicha Ley establece un marco para garantizar la sostenibilidad fiscal y financiera tanto de la provincia como de los municipios. “Su objetivo fue asegurar el equilibrio presupuestario y promover una gestión fiscal responsable por parte de los funcionarios públicos”, precisó Clement.
Sin embargo, desde el CEM –que han estudiado las finanzas municipales en detalle- expresaron que la Ley no se ha cumplido de manera estricta. Entre otros puntos, Clement destacó que la regla preveía la constitución de fondos anticíclicos, lo que rara vez ocurrió. “Tampoco se observaron las normas de austeridad fiscal que fueron exceptuadas en distintas leyes de Presupuesto, lo que desvirtuó el espíritu y el objetivo de la Ley”, sumó el referente empresarial. No solo se trata tener fondos para responder ante las necesidades de los vecinos sino de un elemento clave para aportar a la transparencia y la rendición de cuentas. En este marco, Clement agregó que la calidad de la información publicada por los municipios en el Tribunal de Cuentas es algo que debe mejorar.
Esta semana, la municipalidad de Capital se subió a la ola y firmó un convenio de colaboración con el CEM para colaborar en iniciativas que mejoren el clima de negocios, la transparencia fiscal municipal y la competitividad local. El intendente Ulpiano Suárez, expresó que buscan desarrollar un manual de buenas prácticas, generar un tablero de indicadores de gestión, mejorar la calidad y acceso de la información municipal con el fin de optimizar las tasas municipales.
Alicia Zárate, secretaria de Hacienda de la municipalidad de Guaymallén, relató que esta comuna cuenta con un fondo anticíclico en el marco de la ordenanza de responsabilidad fiscal. Luego de un año en el que tuvieron que barajar y dar de nuevo, la funcionaria aseguró que las tasas han aumentado menos que la inflación y que para el próximo la suba será de 25%. Esto pese a que desde la Nación prevén una inflación del 18%. “La reserva del fondo anticíclico es de tres nóminas salariales y la hemos podido sostener pese a lo difícil que fue 2024″, contó Zárate. Esta comuna proyecta hacer obras –con un plan “realista y más robusto que el de este año”- con recursos propios, en donde también se cuenta parte de la financiación que compartida con la provincia.
Bajar trámites y costos innecesarios
El famoso “no hay plata” no fue gracioso para nadie estos meses y menos para las personas que quedaron por debajo de la línea de la pobreza y la indigencia. Tampoco para los administradores de gobiernos que intentaron hacer malabares –sin mucho éxito- para que no se derrumbara lo poco que había. Aunque con una macro más estable y perspectivas de mejora de la actividad para 2025, el próximo año no será muy diferente para las cuentas municipales que dejarán de tener los aportes nacionales. Mientras se rediscute el reparto provincial y el costo argentino crece de la mano de –entre otras cosas- unos 140 impuestos, las comunas en general no pueden hacerse las distraídas con la eficiencia de sus recursos.
Gustavo Rivarola, economista del CEM, comentó que el Consejo está a punto de finalizar un estudio sobre finanzas municipales en el que se ve que, en términos consolidados, el gasto público municipal aumentó desde 2011 y 2023. Con diferencias entre municipios y períodos, también ha habido incrementos en los recursos municipales. Para el profesional, las comunas deben enfocarse en mejorar la calidad del su gasto al tiempo que bajar el peso del estado local sobre sus contribuyentes. “Hay que tener presente que, cada vez más, competirán entre sí para atraer inversiones”, subrayó Rivarola.
Agregó que en este combo deben entrar elementos tales como la facilitación de trámites municipales y la disponibilidad de talento y recursos como aspectos que definen el clima de negocios y, en muchos casos, la localización de una inversión. “Un municipio pesado y complejo para el contribuyente no puede ser competitivo”, definió el economista que no olvidó la importancia de la cantidad y calidad de los servicios que prestan los municipios. “También es importante trabajar en la correspondencia fiscal ya que la relación entre gasto corriente y recaudación propia es bastante más baja en algunos municipios que en otros”, dijo Rivarola.
En consonancia, el presidente del CEM agregó que en el estudio sobre Finanzas Municipales se advirtió que algunos municipios están ordenados, gestionan bien sus recursos y equilibran sus ingresos en pos de mejorar su autonomía. No todos se comportaron de la misma manera pese a la importancia de tener las cuentas ordenadas y ser austeros debido a que esto impacta en un mejor servicio para los vecinos. En un contexto que tiende a la necesidad de mayor eficiencia, Clement destacó que creen que es importante que las municipalidades trabajen en procesos para facilitar los trámites, lo cual ayudará a traccionar más inversión privada.
Información clara y en tiempo real
En este marco y en función de los últimos anuncios del presidente Javier Milei, el año próximo se impulsarán medidas impositivas que fomentarán la competencia entre las provincias y algo similar podría suceder a nivel municipal. “Las comunas deberían analizar la posible reducción de tasas ya que a veces están desvirtuadas con relación al servicio que percibe el contribuyente y por eso se parecen más a un impuesto”, precisó el presidente del CEM. Agregó que sería bueno que los municipios anuncien los objetivos a alcanzar en un cierto plazo para que los vecinos puedan tener claras las expectativas y poder evaluar tanto la gestión como sus decisiones de inversión.
Para ello, el economista Gustavo Rivarola sugirió, en primer lugar, que cualquier organización que busque ser eficiente y eficaz debe apoyarse en datos para gestionar. “Hacer un diagnóstico claro y un plan de acción realista alineado con los objetivos que se persigan es un punto de inicio”, comentó el profesional. Agregó que la información confiable servirá para el diseño y la implementación de políticas y acciones que impacten positivamente en el ciudadano y en el clima de negocios local.
Entre otras cosas, estos procesos deben incluir la capacitación del personal así como el uso de la tecnología como aliada clave para mejorar la calidad, oportunidad y exactitud de los datos y de la información municipal. “Todos los municipios tienen hoy al alcance de su mano herramientas concretas para mejorar en este aspecto”, comentó Rivarola. Y agregó que la provincia de Mendoza, la Universidad Nacional de Cuyo e inclusive algunos municipios ya son nodos de los llamados ecosistemas interoperabilidad que facilitan el acceso a la información en tiempo real.