En la última jornada bajo la gestión de Sergio Massa como ministro de Economía y Miguel Ángel Pesce como presidente del Banco Central, el mercado financiero experimentó una significativa devaluación del 5,9%, llevando al dólar mayorista a alcanzar los $385.
Este marcado aumento, el más pronunciado desde agosto pasado, sorprendió a los operadores financieros al producirse hacia el cierre de la sesión, con una corrección de 21 pesos en el día.
Con este salto, el dólar minorista, tomando como referencia el Banco Nación, pasó a $400,50, pero es importante tener en cuenta que este valor no refleja la realidad para los ahorristas. Aquellos que buscan adquirir la divisa deben enfrentar el recargo del impuesto PAIS, elevando el precio a $1021 en los bancos minoristas.
Este nuevo panorama también afecta a los dólares alternativos. El dólar blue alcanzó los $1000 en la mañana para retroceder a $990 por la tarde. Mientras tanto, el dólar MEP, negociado en la Bolsa porteña, aumentó un 4,9% a $982, y el contado con liqui alcanzó los $995, mostrando un avance del 6%.
La incertidumbre persiste en el mercado ante la inminente asunción del nuevo equipo económico liderado por Javier Milei. Guillermo Francos, ministro del Interior y vocero del presidente entrante, sugirió que un dólar oficial en $650 sería “aceptable”.
Sin embargo, aún no se clarifica si el ajuste se implementará de una vez y si alcanzará ese valor desde el primer día de gestión.
En el último día de la administración de Miguel Pesce, el Banco Central intervino activamente en el mercado, vendiendo un total de US$119 millones. Durante el mes de diciembre, la entidad ya se ha visto obligada a desprenderse de US$484 millones, señalando la presión existente sobre las reservas internacionales.
La suba del dólar en esta última jornada genera expectativas y preguntas sobre el rumbo que tomará la política cambiaria en los próximos días. La transición de gobiernos deja al mercado en alerta, esperando definiciones claras sobre las medidas que se tomarán para estabilizar la economía y restaurar la confianza de los inversores.
