La Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza (DEIE) dio a conocer el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes de diciembre de 2021. La última medición del año pasado fue del 3,7%; casi un punto porcentual mayor al porcentaje del mes anterior. La aceleración de la inflación arrojó un acumulado anual en nuestra provincia del 51,8%. A nivel nacional, para el INDEC la medición de diciembre fue de 3,8% y la anual de 50,9%.
Mendoza cerró el 2021 con el cuarto porcentaje más alto en el año y fue el noveno mes en el que la inflación no logró romper el piso del 3%, algo que si se logró en noviembre (2,6%). Recordemos que en abril la inflación en nuestra provincia llegó a su pico máximo con el 4,8%, la cifra más alta desde diciembre de 2020 en el que también se llegó al 4,8%. Comparando la aceleración de la inflación con la de diciembre del 2020, el porcentaje de aumento del IPC en 2021 fue un punto porcentual más bajo.
Los rubros que más incidieron en el IPC en diciembre respecto al mes anterior fueron: “alimentos y bebidas” (5,8%) con un impacto en el acumulado anual del 52,8%, un punto porcentual por sobre la inflación anual. “Indumentaria” (4,1%) y una suba del 70%; “otros bienes y servicios” (3,9%) y un amento anual del 33,4%; “educación” 2,8% y un 56,8% en total.
En el caso del rubro “espaciamiento” este mostró un incremento 2,7% respecto al mes anterior y un acumulado en 2021 del 45,2%; “transporte y comunicaciones” con el 2,5% y un total anual del 50%; en tanto que el rubro “atención médica y gastos para la salud” aumentó un 0,3% respecto noviembre pero arrojó un porcentaje acumulado del 56,8% en 2021.
Para el economista Raúl Mercau los programas de congelamientos de precios intentaron mitigar los efectos de la inflación, mientras el Gobierno esperaba lograr un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin embargo, en los sectores intervenidos con estos planes de “congelamiento”, como es el caso de “alimentos” las subas de los precios superaron la inflación anual de 50,9%, registrada por el Indec.
“En la canasta de los argentinos pesan mucho producto con precios que son fijados por las grandes empresas”, le había confiado a Los Andes previamente Mercau. Es bueno señalar que ante la caída del poder adquisitivo del salario se ha privilegiado la compra de alimentos, demanda que impulsó la suba de precios. En el caso de la “indumentaria” los incrementos estuvieron un 20% por arriba del acumulado anual.