Un informe presentado por el Instituto de Trabajo y Producción (ITP) de la UNCuyo refleja el panorama crítico del empleo privado formal durante 2020. La crisis profundizada por la pandemia tuvo repercusiones en grupos vulnerables como mujeres y jóvenes, y el Gran Mendoza se situó como el segundo gran aglomerado urbano que más cayó en materia de empleo en diciembre, con una caída interanual del 4,7% en empresas de diez o más trabajadores, sólo superado por el Gran Jujuy (-6,8 %).
María Eugenia Martín, secretaria general del ITP UNCuyo sostuvo, en el informe del Observatorio Laboral, que el escenario configurado a partir del Covid-19 golpeó especialmente a quienes trabajan en el mercado informal, destacando a “jóvenes, mujeres y grupos que continuamente enfrentan procesos de segregación, discriminación y explotación en sus diarias jornadas de trabajo”.
Además, Martín apuntó a las “enormes desigualdades estructurales” de Argentina, con sistemas de empleo, salud y seguridad social fuertemente segmentados. “El golpe llegó sobre una sociedad que transitaba años de alta inflación, déficit fiscal, crisis de deuda, desempleo estructural y pobreza crónica, escenario que se agravó con la irrupción de la pandemia”, agregó.
En lo que se refiere a la provincia, en el informe se señala que durante 2020, en el Gran Mendoza, la tasa de desempleo registró un pico del 15,3% entre abril y junio, empujando el promedio anual al 11%. En especial, preocupa el alto nivel de informalidad que registran en la provincia los sectores económicos más castigados por la crisis.
“La recuperación del empleo, que se registró en la segunda mitad de 2020, estuvo impulsada por la creación de puestos de trabajo de baja calidad, haciendo disparar la informalidad al 41,4% en el tercer trimestre del año”, describió la secretaria general del ITP UNCuyo.
Según la Encuesta de Indicadores Laborales del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTEySS), que analiza el empleo formal de empresas con 10 o más trabajadores, en diciembre de 2020 el Gran Mendoza tuvo una caída interanual del 4,7%, siendo el segundo aglomerado del país con mayor retracción. Si se miran los datos del SIPA (también del MTEySS) que incluye a la totalidad del empleo privado en la provincia, se observa una caída interanual aún mayor, del 5,8%.
“Es un tiempo para convocar, acordar diagnósticos, crear consensos, elaborar estrategias y coordinar políticas de Estado que prioricen la acuciante situación de los hogares con mayor vulnerabilidad, las infancias, jóvenes, mujeres y trabajadores en condiciones de informalidad, a gran escala y que contemplen las realidades regionales y locales”, reflexionó María Eugenia Martín.
Tendencia y magnitud
Albina Pol, coordinadora del Observatorio Laboral del ITP UNCuyo, explicó que este análisis se realiza desde hace años y combina los datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Indec y de los números de empleo registrado que maneja el Ministerio de Trabajo de la Nación. De esa forma, buscan hacer un abordaje integral de la dinámica laboral de la provincia en el marco del contexto nacional.
Respecto de la caída del empleo, Pol comentó que les llamó la atención la magnitud de la caída del empleo formal en la provincia, pero se trata de una tendencia que viene de años anteriores: “Desde la crisis de 2018-19, el empleo en la provincia viene teniendo un desempeño muy negativo. A partir de la crisis generada por la pandemia, se profundizó”.
Los datos del MTEySS reflejan esta caída importante de casi el 6% en el empleo privado en Mendoza. “Principalmente viene explicada por el desempeño que ha tenido la construcción (eso explica también la caída en Jujuy, por ejemplo), pero también por la baja tan significativa que ha tenido el empleo privado en el sector de comercio, muy ligado a la dinámica del turismo en la provincia”, apuntó la coordinadora.
El informe señala que entre 2012 y 2019 el número de asalariados registrados privados de la provincia se estancó en torno a los 240.000 trabajadores. En 2019, con la profundización de la crisis que afectó a todos los sectores productivos, el empleo privado tuvo una caída del 0,8 % promedio anual. Finalmente, 2020 fue el año de peor desempeño del empleo privado provincial de los últimos tiempos, con una abrupta caída interanual de 5,8%, según el SIPA.
Si bien durante el año pasado el PBG provincial cayó menos que el PBI nacional (entre un 7 y 8,6% en Mendoza contra un 10% a nivel nacional), Pol sostuvo que “no hay una relación directa” entre la magnitud en la caída del producto y el empleo privado formal. Su explicación es que esos índices son el resultado de la dinámica económica general e incluyen tanto al sector formal como al informal.
“Puede haber caído menos la economía, pero Mendoza tiene en su estructura productiva una fuerte incidencia de actividades con alto nivel de informalidad, como el caso del turismo y del comercio. Hubo una caída consecutiva en los últimos tiempos del empleo industrial, por ejemplo, que es uno de los sectores que tiene mayor nivel de formalidad en términos de mercado de trabajo”, apuntó Pol.
Un nuevo trimestre mejor
Desde el Ministerio de Economía y Energía de Mendoza opinaron que, aun cuando 2021 es un año atípico para hacer comparaciones, se debería mirar el promedio anual en vez de hacer un análisis puntual con el interanual de diciembre. “La tasa de desocupación para Mendoza fue en promedio de 11% en 2020, tocando un piso de 8,2%, mientras que en el conjunto de aglomerados fue de 11,6%”, afirmaron desde ese ministerio.
En ese sentido, creen que si se hiciera otro recorte y en vez de mirar diciembre se tomara el tercer trimestre (plena pandemia), saldría que Mendoza tuvo una baja de desempleo interanual en 0,5 punto porcentual mientras que a nivel nacional aumentó 2 puntos porcentuales.
De todos modos, desde el Gobierno hacen números sobre el primer trimestre de 2021 (datos que se darán a conocer en junio) y esperan tener niveles de empleo similares al mismo período de 2020. Algunas razones para fundamentar esa recuperación son el aumento de precios y cosechas de cultivos centrales como uva, ajo, tomate y durazno, la apertura limitada del turismo en el último verano y el crecimiento de las economías del conocimiento.
“Mucho tiene que ver el haber mantenido el equilibrio economía-salud y todas las políticas proactivas que ha tenido el Gobierno provincial, desde la baja de Ingresos Brutos a 51 actividades que benefició a 9.777 empresas, hasta las inversiones a través del Mendoza Activa”, señalaron.
Buenas perspectivas de contratación en Cuyo
La consultora de recursos humanos ManpowerGroup dio a conocer los resultados de su encuesta sobre expectativas de empleo para el tercer trimestre de 2021 (de julio a setiembre). A pesar de la segunda ola de Covid-19, anticipan expectativas de contratación estables en el país.
Las regiones que arrojan las expectativas de contratación más fuertes son Cuyo y Patagonia, ambas con una Expectativa Neta de Empleo (ENE) de +5 %. Incluso, en comparación con los resultados del trimestre anterior, las expectativas aumentaron en tres de las seis regiones y Cuyo reportó la mejora más significativa, de 4% (seguido por la Patagonia, con un aumento de 2 %). Por el contrario, el Noreste argentino reporta las intenciones más débiles por segundo trimestre consecutivo, con una caída del 3% en expectativa de contratación.
El valor de la ENE se obtiene al tomar el porcentaje de empleadores que espera incrementar sus plantillas y restar el porcentaje de aquellos que proyectan una disminución durante el próximo trimestre. Los resultados fueron obtenidos tras encuestar a más de 600 empleadores argentinos, quienes reportaron una ENE de +1%. A nivel nacional, se observó un declive de 1 % respecto del período anterior y un aumento de 8% en la comparación interanual.
Luis Guastini, Director General de ManpowerGroup Argentina, comentó que, “pese al declive de un punto porcentual en la ENE en comparación con el trimestre anterior, las intenciones de contratación por parte de los empleadores argentinos continúan siendo positivas, principalmente por la situación de la agricultura y pesca, y las regiones Cuyo y Patagonia”.
Datos del informe 2020 del Observatorio Laboral del UIT UNCuyo
• En el conjunto de los 12 principales aglomerados urbanos del país, el empleo privado se retrajo un 2%. Sólo tres aglomerados superaron esta cifra: Gran Jujuy (-6,8 %), Gran Mendoza (-4,7 %) y Gran Buenos Aires (-2,5 %). (Fuente: MTEySS-EIL)
• El Gran Mendoza fue el segundo aglomerado con mayor retracción del empleo privado registrado en empresas de 10 o más trabajadores durante 2020 (-4,7 %). Eso acumula 30 meses consecutivos de caída en el empleo privado formal.
• En cambio, según los datos del SIPA, que centraliza las declaraciones juradas de las empresas sobre sus trabajadores, la caída interanual del empleo privado provincial fue aún mayor, del 5,8 %. En diciembre, el número de trabajadores del sector se ubicó en 227.950, 13.223 menos que a fines de 2019 (Fuente: MTEySS-SIPA)
• Las ramas más afectadas fueron construcción (-21,3 %), comercios, restaurantes y hoteles (-5,2 %) y servicios (-3,4 %). (Fuente: MTEySS-EIL)