El Grupo Techint, el principal holding industrial de Argentina, anunció que llevará a cabo un plan de ajuste que buscará reducir sus costos sin recurrir a despidos. La empresa tomó esta decisión en medio del contexto económico y con el objetivo de reforzar su posición en el mercado, enfrentándose a desafíos como la competencia de productos de origen chino.
“La empresa se reunió con el gremio para buscar medidas que permitan recuperar competitividad renegociando contratos con proveedores, entre otras acciones”, indicaron a Noticias Argentinas fuentes de la compañía.
En el mismo hilo, explicaron que se está analizando “reducir horas extra y el freno de ingresos cubrevacaciones para el período de verano, tal como solíamos hacer en años anteriores”.
El anuncio generó cierta inquietud y preocupación en el sector industrial, ya que el Techint es uno de los mayores empleadores del país y el principal productor de acero, además de ser el mayor productor global de tubos sin costura (usados principalmente en la industria petrolera).
El conglomerado incluye empresas como Tenaris, Ternium, Techint Ingeniería y Construcción, Tenova, Tecpetrol, y Humanitas. También tiene una importante participación en los sectores de petroquímicos, minería, infraestructura y telecomunicaciones.
El presidente de la compañía, Paolo Rocca, advirtió previamente sobre la presión y competencia desleal que representa China para el sector, y la necesidad de que el grupo reduzca sus costos para mantener su competitividad.
Ternium y su programa de ajuste
En este contexto, Ternium viene bajando fuertemente sus precios por un lado, y el mercado parece haber encontrado un techo en el camino de recuperación, que se venía viendo.
El mercado ha dejado de crecer intermensualmente, mientras que los despachos de octubre fueron similares a los septiembre y los de noviembre no parecen superiores, informó NA. Es por eso que Ternium ha tomado el desafio de buscar mejorar su competitividad y está impulsando un programa de reducción de costos en todos los frentes.
Hay también preocupación por el aumento de costos impositivos - en momentos que hay que ganar productividad y competitividad-, tales como anticipos de ingresos brutos y aumentos en las tasas municipales de 30%.