En medio de la crisis por la escasez de reservas, el Banco Central volvió a vender dólares. Según informó Todo Noticias, este martes la entidad se desprendió de USD 64 millones de dólares.
Con esta última venta, el BCRA acumula más de USD 800 millones con saldo negativo en lo que va de agosto. El principal motivo de la transacción tiene que ver con la demanda que se requiere por la importación de energía.
Este martes se necesitaron US$100 millones para cubrir la demanda del pago de importación de energía y combustible. Según fuentes del mercado, en lo que va de agosto, cumplir con estas necesidades tuvo un costo de US$600 millones para el Banco Central.
Esta mañana, el presidente del Banco Central (BCRA), Miguel Pesce se mostró optimista por las perspectivas de las próximas semanas.
“Todavía en agosto estamos en niveles de pago de energía elevados. Esperamos que ya la semana que viene esto ceda y esperamos una reducción en el mes de agosto de US$ 600 millones (en dichos pagos) que permitiría mejorar la situación en la balanza cambiaria”, afirmó en diálogo con El Destape Radio.
Pesce aclaró que dicha proyección es “conservadora”, y que “hay otras estimaciones que hablan de una caída mayor” en la necesidad de importaciones.
“Julio terminó con US$ 2.400 millones. Estamos esperando que las importaciones de agosto queden por debajo de los US$ 1.800 millones y ya septiembre se ubique por el orden de los US$ 900 millones como ocurrió en el mes de abril”, agregó.
Pesce también confirmó que el “swap” de monedas con China “está activo y se está utilizando”. “Tenemos un procedimiento para activar el swap cuando vemos que las importaciones chinas o el déficit comercial crece. Estamos en esa tarea en ese momento”, detalló.
El swap, que posee un límite de US$ 20.000 millones tras una ampliación en febrero de este año, es un acuerdo de intercambio financiero en el que una de las partes se compromete a pagar con determinada periodicidad una serie de flujos monetarios a cambio de recibir otra serie de flujos de la otra parte.