Una vez más, la discusión por la tolerancia cero de alcohol se instaló en el país. Es que La Rioja declaró “Emergencia Vial” en todo su territorio por un plazo de seis meses y prohibió la conducción de cualquier vehículo con una alcoholemia superior a cero (0) miligramos de litro por sangre.
La medida generó preocupación y rechazo por parte del sector bodeguero, cuyo mercado interno depende en gran parte de las ventas en bares y restaurantes. Además de La Rioja, la tolerancia cero rige en Córdoba, Salta, Tucumán, Entre Ríos, Jujuy, Río Negro y Santa Cruz, según informó el Ministerio de Transporte de la Nación
Qué dice la normativa
A través de Decreto de Necesidad y Urgencia N° 154/21 el Gobierno de La Rioja estableció la Ley Seca. En el artículo 1°, la normativa dicta: ”Declárese la Emergencia Vial en todo el territorio de la provincia de La Rioja desde la fecha del presente y por el término de 6 meses, pudiendo la Función Ejecutiva prorrogarla total o parcialmente por igual lapso de tiempo, con comunicación a la Función Legislativa, conforme lo manifestado en los considerandos precedentes”.
En ese contexto, el artículo 2° dispone, “mientras dure la vigencia de la emergencia declarada, la ‘tolerancia cero’ para la conducción de cualquier vehículo con una alcoholemia superior a cero (0) miligramos por litro de sangre”. Por otro lado, La Rioja prohibió la venta de bebidas alcohólicas durante los fines de semana, más precisamente entre las 00:00 del viernes hasta las 08:00 del lunes. En ese punto están exceptuados los locales del rubro gastronómico, tales como restaurantes, confiterías, y bares.
Preocupación bodeguera
La Rioja es una provincia especial para el sector vitivinícola, no solo porque se consumen en ese mercado cerca de 20 millones de litros al año, sino porque es además la tercer provincia productora de vinos, detrás de Mendoza y San Juan.
Patricia Ortiz, presidente de Bodegas de Argentina consideró que las medidas adoptadas por La Rioja son “exageradas”. Desde su punto de vista, la reducción del número de accidentes no se logra prohibiendo el consumo de alcohol, sino educando al consumidor.
“En un momento tan sensible, en el que las ventas han sufrido con el cierre de los restaurantes, es un error poner una restricción sobre una economía regional, que además es provincia productora”, advirtió.
También compartió su opinión Carlos Fiochetta, gerente general de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar). “La prohibición al consumo de alcohol es negativa, fundamentalmente con el vino, que es considerado un alimento y está asociado al consumo en familia. Además, La Rioja es la tercer provincia que más vino produce del país. La restricción la hace mucho daño a la industria”, indicó.
Por otro lado, el representante de Coviar destacó que en ninguna otra provincia la “tolerancia cero” llegó al punto de que se prohíba la comercialización. “No recuerdo una medida tan drástica”, lamentó.
Por su parte, Sergio Villanueva, gerente de la Unión Vitivinícola Argentina (UVA), aseguró que la “tolerancia cero” no da resultados, según lo han demostrado diferentes estudios alrededor del mundo. “Sin duda las ventas caerán con esta medida. El problema, además de la prohibición en sí, es que la gente volverá a cambiar sus hábitos de consumo, perjudicando al ritmo de ventas”, apuntó.
Villanueva, Ortiz y Fiochetta, coincidieron en que la industria debe intentar revertir la medida a través del diálogo con el gobierno riojano.