“Como todos sabemos, somos el sector que más contribuye al crecimiento y dinamización de la economía. Es por eso que debemos ser parte de los grandes proyectos de infraestructura que se planifican en la provincia”, sostuvo en su discurso Dalmiro Barbeito. El empresario fue el encargado de dar la bienvenida a los invitados que participaron en la celebración de los 20 años de la Cámara de Empresarios Independientes de la Construcción de Mendoza (Cecim). Entidad que nació en 2001, frente a un escenario tumultuoso, y que hoy tiene presencia en los 18 departamentos de la provincia.
Una celebración que reunió a 600 invitados entre empresarios, profesionales del sector y personalidades de la política. “Comprendimos que hacía falta un espacio que atendiera las necesidades del sector de las Pymes constructoras de la provincia, para generar la subsistencia de nuestras empresas, con un entorno que, si lo sabíamos sobrellevar con inteligencia y vocación gremial empresaria, seguramente generarían grandes momentos y oportunidades, algo a lo que los empresarios argentinos estamos muy acostumbrados y, a la vista está, fue un acierto”, agregó Barbeito en sus palabras.
“Las Pymes constructoras tenemos el tipo y tamaño de empresas que la nueva Argentina requiere: porque contamos con estructuras dinámicas, pequeñas y competitivas, dotadas del excelente recurso humano con que cuenta nuestra provincia”, puntualizó el empresario. El marco de celebración es una buena excusa para obtener una fotografía actual del sector -que en líneas generales- durante la última década ha tenido un crecimiento orgánico en torno al 32%. Dalmiro Barbeito, el titular del Cecim, aceptó el desafío y habló sobre los detalles de la realidad que viven las pequeñas empresas de la construcción.
- Ha señalado el umbral que representará las elecciones de 2023. ¿Cómo llegan las Pymes constructoras?
-Las pymes constructoras llegamos con el desgaste de una macro economía que no crece desde hace más de seis años, atravesando una pandemia que fue muy larga y ralentizó el sector, y soportando una economía con índices inflacionarios nunca vistos; este combo afecta el desarrollo de los grandes proyectos tanto a nivel privado como los de inversión Pública.
Los emprendedores Pymes siempre nos hemos ido adecuando a los vaivenes económicos de Argentina, somos sobrevivientes de este país que nos pone siempre algunas piedras en el camino pero nos ha dado muchas oportunidades. Somos optimistas a largo plazo, casi por naturaleza, entendemos que cuando haya una reactivación tenemos que estar preparados para los proyectos que se generen.
-Con un escenario inflacionario, ¿Cuál es la relación entre planificación y costos?
-Con el escenario inflacionario que estamos viviendo, los presupuestos básicos de las obras son meramente referenciales, los costos aumentan al mismo nivel que se devalúa el peso. En este sentido tenemos que volver a determinar los precios de los contratos entre un 6 y un 8% mensual, debemos tomar un coeficiente para adecuar los ítems mes a mes y ser los más precisos posibles a la hora de adecuar el precio a medida que se certifica.
-En materia de obra pública, desde la Nación señalan que la inversión podría ser equivalente al 1,9% del PBI. ¿Qué impacto tendría para las pequeñas empresas?
-Honestamente no sé cuánto representa el 1,9% del PBI Nacional en materia de inversión pública, lo que sí estoy seguro que en Mendoza tenemos que procurar que la inversión pública siga siendo alrededor del 10% del presupuesto de la provincia. Desde que salimos de la pandemia estos porcentajes se han ido respetando y entendemos que es el camino para poder a pelear las graves consecuencias de la macroeconomía que estamos viviendo como un generador de inversión y empleo para todos los mendocinos.
-¿Y los plazos de certificación de obra?
-Los plazos de certificación de Obra tienen que ser lo más corto posibles para poder apaliar los grandes índices inflacionarios que sufrimos mesa mes. Mientras más eficiente seamos en el pago de los certificados de obra, mejores serán los precios que podremos cotizar las pymes constructoras para encarar un proyecto. (Ndr: durante su discurso por los 20 años de Cecim, Barbeito había planteado: “Es primordial acortar los plazos de cobro de los certificados de obra y hay que adaptar los sistemas administrativos de pago a la nueva realidad. Esto se ha visto en algunas reparticiones, pero en otras no”).
-¿Cuál es el impacto real de Mendoza Activa para el sector?
-Creo que Mendoza Activa tuvo un rol muy importante en la reactivación sobre todo el sector de la construcción a menor escala sobre todo en proyectos privados unifamiliares. Por otro lado, también existieron pequeños emprendimientos de loteo y construcción de PH que se vieron muy favorecidas con este plan. En el momento que se tomó la decisión de subsidiar la construcción, alentó a muchos inversores que se habían detenido sus proyectos producto de la Pandemia y esto constituyo una gran activación para el sector.
- ¿Qué movimiento generará la aprobación de la ley de crédito hipotecario?
Desde la Cecim entendemos que esta medida puede generar una activación en el sector de la construcción de viviendas privadas. Tenemos que ver cómo es la implementación de la ley, porque el espíritu es que hay un índice que reajusta el crédito (Coeficiente Hogar Argentino) en base al coeficiente de Variación Salarial, tenemos que ver como se termina implementando para ver si efectivamente llega a la gente que le hace falta construir la primera vivienda.
- La buena salud del sector es un indicador de dinamismo económico ¿cómo se cuida el empleo?
-El sector de la construcción es el que más dinamiza la actividad económica, siendo un generador de empleo inmediato cuando se inicia un proyecto. Tenemos que destacar la ley del convenio de trabajo de la Uocra. El mismo tiene que ser un ejemplo en todos los otros rubros de la economía argentina si se quiere racionalizar la ley de trabajo en el país.
- Pensemos en un círculo virtuoso. ¿hacia qué lugar conducirá la nave?
-Qué buena pregunta, “la nave” con una macroeconomía donde la inflación es del 8% mensual transita mares tumultuosos. Entiendo que la única manera de salir de este estancamiento económico es con una gran política de Inversión Pública en materia de infraestructura, la cual hace falta por la nueva realidad ambiental de la provincia de Mendoza. Esperando que la economía argentina en algún momento se normalice, para que esta inversión de infraestructura sea la base del desarrollo de la actividad privada y necesaria en el desierto que hemos elegido para vivir.
