Construir una vivienda de 61 m², de ejecución tradicional, considerada “económica”, en Mendoza, implica una inversión de unos $4 millones. En cambio, para una vivienda de “mediana calidad”, con una superficie de 136 m², hay que destinar más de $13 millones.
Los datos provienen del último informe sobre costos de la construcción del Centro de Ingenieros de Mendoza que, desde enero de 2017, realiza un seguimiento mensual de la evolución de los precios de materiales y mano de obra utilizados en la ejecución de obras civiles, en especial del costo de construcción de viviendas.
De acuerdo con los datos proporcionados, el costo del metro de construcción de una vivienda económica es, a enero, de $64.814/m2 y el de la vivienda de mediana calidad de $96.403/m2. Ahora, para aquellos que tengan ahorros en dólares y teniendo en cuenta la cotización del comprador del Banco Nación los valores son U$S765/m2 para la primera y U$S1.137/m2 para la segunda. Si se tiene como referencia el valor del dólar informal o blue los valores “bajan” a U$S423/m2 y US$628/m2 respectivamente.
Aumentos en pandemia
Durante el último año, el costo de la construcción creció un 49,08%. Pero si sólo se estima el costo de los materiales durante 2020, la variación es 77,25%.
“Un aspecto a destacar es que se mantiene la falta de stock de hierro, perfiles y chapas que ocurre desde octubre de 2020”, se explica en el informe que lleva la firma de los ingenieros Daniel Dimaría y Alejandro Carosio, presidente y secretario de la entidad.
De hecho, durante enero, un relevamiento de Los Andes advirtió grandes dificultades para conseguir hierro y en los corralones señalaron que no disponían de stock, o bien, que no podían vender porque no tenían precios de reposición.
Así, las grandes distribuidoras locales se mostraban cerradas al público general, con stocks suficientes solo para cumplir con entregas pactadas, y sin márgenes para obras o pedidos nuevos.
Al respecto, el empresario Guillermo Palumbo, (distribuidor directo de la red Acindar), explicó que el factor principal que llevó a la falta de hierro para la construcción fue “la gran demanda en pandemia”, seguida de una menor producción a causa de las políticas de aislamiento.
Sin embargo, señaló que los precios no habían subido más que el porcentaje inflacionario mensual. Distinta fue la situación en los corralones donde, según explicaron, en agosto una barra de hierro que valía $500, duplicó su valor dos meses después. No obstante, durante enero y febrero de este año aguardan que la situación se regularice, teniendo en cuenta que son meses en donde “la gente construye menos”.
En cuanto a la mano de obra, durante 2020, la variación estuvo en el orden de 20,94%, según los datos del Centro. Si el mismo valor se expresa en dólares, el costo cayó 17,32%.
El Indec, en tanto, en su informe sobre costos de la construcción (Buenos Aires), registró a noviembre un alza de 17,9%. Este resultado surge como consecuencia de las alzas de 20,4% en “Mano de obra asalariada” y de 6,4% en “Subcontratos de mano de obra”. Esto, por el acuerdo salarial de la Uocra, de octubre de 2020.
De igual manera, si se estima en dólares las variaciones de los costos en general, durante 2020, se produjo un incremento de 2,03%. Aunque los materiales, que sí se relacionan con las variaciones en la cotización, así como dificultades para importar que estuvieron presentes durante gran parte de 2020 (por cepo y mayores regulaciones aduaneras), se incrementaron 21,3% en dólares.
Oportunidad en dólares
El Centro de Ingenieros sumó a su último estudio, las variaciones que se observan si se compara el dólar blue con el oficial.
Según dichos datos, para quienes tenían ahorros en esa divisa, los precios tuvieron variaciones negativas y, de hecho, les resultó más barato construir. Así, en dólares blue, durante el último mes el costo de construir cayó 3,43% y durante el último año 29,15%.
El costo de la mano de obra ya era bajo a valores oficiales, pero si se lo compara con el precio del dólar blue, se estima una caída superior a 42%, e incluso para los materiales, la variación durante 2020 fue -15,76%.
Estanislao Puelles Millán, presidente del Colegio de Corredores Públicos de Mendoza, explicó que al igual que el resto de las propiedades, en los lotes se observa una baja en los precios en dólares y un aumento en pesos.
Desde setiembre comenzó a moverse la construcción y, con ella, la venta de dólares y por efecto del propio aumento del dólar, “un lote que cuando el dólar equivalía a $50 valía u$s40.000, hoy vale u$s30.000”.
De acuerdo con Puelles Millán, a diferencia de otros años, durante 2020 no surgió un “dólar ladrillo” o “celeste”. No se opera, como en el 2009, con un intermedio entre el oficial y el paralelo. “Lo que sucedió fue que directamente, bajaron los precios de las propiedades en dólares”, explicó.
Ahora bien, en pesos, para adquirir un lote con servicios y, dentro de las ubicaciones más buscadas por los mendocinos (cercanía a los accesos y centros urbanos), “hay que pensar en una inversión que parte de entre los 2 y los 3 millones de pesos (a fines de 2020). Se trata de un mercado muy atomizado, la oferta es muy variable, y en barrios privados, o por grandes superficies, los precios aumentan”, comentó.