“Tuvimos que adaptarnos y aprender, del día a día, a partir del momento en que iniciamos la cuarentena a causa del Covid-19”, afirma Alejandro Soldati. El gerente de la Sucursal Mendoza del Grupo Palmero señala que hay expectativas de crecimiento con la puesta en marcha de la economía, pero que el año en curso también obligará a todos los sectores a romper nuevos paradigmas.
Desde el sector del agro y el material mecánico para la cosecha, a la maquinaria pesada para desarrollar la explotación minera o de petróleo, Soldati por medio de la demanda, tiene una radiografía completa de la producción dentro de la provincia. “Nuestra expectativa para el 2021 sigue siendo la de un mercado demandante y con un gran potencial de ventas”, sostiene.
-¿Cómo se prepara la empresa para la normalización de la actividad económica?
-Seguramente el 2021 traerá de la mano nuevas experiencias y nos seguirá obligando a romper paradigmas. Esto, teniendo en cuenta que seguiremos conviviendo con el virus por un tiempo más.
Actualmente seguimos trabajando y preparándonos, conforme los protocolos y normas vigentes, para atender aquellos clientes que han comenzado a visitar nuestras instalaciones interesados en ver los productos que comercializamos. El interés de los clientes, al momento de comprar un tractor, una vendimiadora o un compresor, es poder ver, tocar, poder subirse y si es posible probar el equipo que quieren adquirir. En estos productos aún es importante la compra presencial.
Independientemente al interés que demuestran los clientes, creemos que estamos adaptados a las nuevas modalidades de trabajo que trajo aparejada la pandemia. Seguiremos apostando y llevando, en paralelo a la demostración presencial, una nueva forma de hacer negocios. La demanda de nuestros productos se mantuvo durante el 2020 con resultados razonables a pesar de la situación que provocó la pandemia y el contexto económico del país.
-¿Cómo respondió el mercado a la propuesta que han generado?
-Durante el año pasado el mercado fue demandante de los productos que fabricamos, como los tractores Massey Ferguson y las Vendimiadoras Pellenc.
La oferta de los tractores no pudo cubrir las expectativas de la empresa y de nuestros clientes debido a la falta de producto. Las terminales de nuestros representados tuvieron problemas logísticos por la pandemia para cumplir con su programación de fabricación, además de problemas en la autorización de las importaciones por parte del Gobierno.
Nuestra expectativa para este año sigue siendo la de un mercado demandante y con gran potencial de ventas. Las mismas dependerán de la oferta que obtengamos de las empresa que representamos de Argentina y el exterior.
-Su oferta es amplia, ¿para ustedes, qué sector tendrá una recuperación más acelerada?
-La oferta de Palmero está dirigida a los segmentos agrícola, construcción, minería y petróleo. Esperamos para el 2021, aún en pandemia, una recuperación en los distintos sectores, salvo en la construcción porque aún no muestra buenas señales debido a la recesión que se observa en obra pública.
Entendemos que esta recuperación se dará de no mediar problemas macro-cambiarios, es decir que modifiquen el tipo de cambio oficial. También si el gobierno promueve incentivos concretos para la inversión y fundamentalmente por las decisiones que tome respecto a las importaciones.
Los pedidos de autorizaciones para la importación de equipos, las asignaciones de cupos de dinero por empresa, la gestión de permisos para girar fondos al exterior a través del banco -donde se tiene cuenta- para que éste solicite autorización al Banco Central (BCRA) y lo difundido por los medios sobre las últimas normativas, generan una alta incertidumbre para la proyección del negocio y la disponibilidad de productos de cara al futuro.
De todas formas, al día de hoy el segmento agrícola nos sigue demandando equipos. Nuestro desafío está en tener producto para ofrecer a los compradores.
- ¿Qué productos demanda principalmente el sector agrícola?
-La mayor demanda del sector agrícola es de tractores, seguida de grupos electrógenos y luego de vendimiadoras. Esta última con alto potencial de crecimiento debido a las necesidades de mecanizar la cosecha en el contexto actual.
-¿Qué porcentaje del campo mendocino está mecanizado?
-No podemos precisar qué porcentaje está mecanizado, pero sí podemos decir que en nuestro principal segmento, el vitivinícola, la tendencia por la cosecha mecánica sigue en crecimiento, dado que la falta de mano de obra calificada en los últimos años ha sido cada vez más notable. Anualmente ingresan al mercado entre 10 y 15 cosechadoras de distintas características.
En nuestro caso, con Pellenc, ingresamos al mercado cosechadoras autopropulsadas adquiridas principalmente por empresas prestadoras de servicios de cosecha que ofrecen los mismos a las principales bodegas de Argentina y cosechadoras de tiro que son adquiridas por bodegas más chicas, y pequeños y medianos productores de uva.
Esta última cosechadora, la de tiro, ha despertado mucho interés entre nuestros clientes, debido a la brecha de precio que existe respecto a la autopropulsada y su excelente calidad de cosecha.
-La compañía tiene planes de expansión, ¿hacia qué rubros o servicios apuntará?
-Nuestro objetivo para este año está centrado en consolidar nuestra trayectoria de 75 años, seguir siendo líder en la fabricación de grupos electrógenos y ser los principales referentes del mercado de tractores y cosechadoras para viñedos.
-¿Cuál fue la principal enseñanza que le dejó el 2020?
-Una de las principales enseñanzas que nos dejó el 2020 fue la capacidad de adecuarnos a las nuevas formas de trabajo que impuso la situación, con herramientas tecnológicas existentes, que hasta antes de la pandemia, no utilizábamos como lo hacemos hoy tan naturalmente.
Por otra parte aprendimos a romper con los paradigmas, principalmente los relacionados con el Home Office, que en algunos casos mostró una productividad mayor a la que existía anteriormente. A eso se suman otras herramientas informáticas, como el uso de la videoconferencia para las reuniones con clientes, proveedores, equipos de trabajo, gerencias y dirección, entre otros.
En resumen, la principal enseñanza que ha dejado el escenario de pandemia es el hecho de haber salido fortalecidos y prestando más atención a aspectos importantes de la organización que previo a la crisis se podían haber desatendido. Las situaciones adversas generan oportunidades de mejoras que debemos aprender a capitalizar.