El presidente Alberto Fernández aseguró este jueves que no está “contento ni conforme” con los indicadores de inflación que se vienen registrando en la economía de la Argentina y se mostró confiado en que el programa económico acordado con el FMI ayudar a desacelerar los precios domésticos.
“El programa económico va a ayudar a desacelerar la inflación, de eso estamos seguros. No estamos conformes ni contentos. Lejos estamos de estar contentos con los índices de inflación que tenemos hoy en la Argentina. Debemos seguir trabajando en eso”, expresó el mandatario en una rueda de prensa en París.
Dijo que su programa económico tiene tres pilares, que son la producción, el trabajo y la mejor distribución del ingreso. “La economía está creciendo, se están generando muchos trabajos, pero nos está costando mucho corregir la distribución del ingreso y en eso tiene mucho que ver la inflación”, comentó.
Expresó además que aun cuando el Gobierno alienta que las paritarias resuelvan ese problema haciendo que los salarios estén por encima de la inflación, hay que trabajar seriamente en todas las causas que generan la inflación.
“Ahora, hay un porcentaje de esa inflación que hoy vivimos y que creo que es relativamente alta, que es derivada del aumento de los precios de los alimentos como consecuencia de la guerra. Y muchos otros insumos, como los fertilizantes, por ejemplo”, dijo el jefe de Estado.
En ese sentido, agregó: “La inflación es muy dañina, porque daña a los sectores menos pudientes. La inflación es el impuesto que se les cobra a los que viven de un sueldo. Y por lo tanto debemos rápidamente parar este tema”.
Fernández agregó que como esto es parte de la preocupación del Gobierno, quiso plantear la situación a líderes de otros países por el conflicto que existe actualmente en Europa, con la invasión de Rusia a Ucrania.
El Presidente afirmó que la segmentación tarifaria es “una medida muy progresiva” en términos económicos, porque hará que quien tiene un elevado poder adquisitivo, pague el precio real de lo que consume en gas o electricidad.
“Estos aumentos se vinculan directamente a cómo evoluciona el salario de la gente, de modo tal que el alza de las tarifas nunca puede ser mayor al incremento de los salarios. Esto tiene un criterio distributivo muy grande”, dijo el Presidente.
