De a poco la provincia va retomando su ritmo normal, pero las secuelas de la pandemia, y del aislamiento social preventivo y obligatorio decretado para menguar sus efectos, quedaron en la economía local y del país, y en esta ocasión, más que nunca, ser precavidos con el dinero es el mejor plan para evitar sobresaltos futuros.
Este mes se cobra el medio aguinaldo, pero con las complicaciones que aseguran estar viviendo las empresas muchos asalariados lo recibirán en cuotas, o incluso no lo recibirán por ahora.
Aún así, quienes tengan dinero extra tendrán pocas opciones para gastarlo como quizás hacían en otras épocas, las escapadas de fin de semana, o pagar unas vacaciones de invierno no son opciones muy viables, y es posible que algunos afortunados se encuentren con la oportunidad de invertir y reservar fondos para tiempos mejores.
En este caso, ¿qué es conveniente hacer con el dinero?
De acuerdo con el economista Alejandro Trapé, las mejores alternativas son claras “dólar ahorro, y fondos comunes de inversión”, dos posibilidades a las que se puede acceder desde cualquier banco en el que uno tenga cuenta.
En el primer caso, el máximo es u$s200 y se trata de un resguardo seguro para $18.600, con la cotización actual más impuestos. A la segunda alternativa se “suscribe con un mínimo de $1.000 y se puede rescatar en 24, 48 o 72 horas, según qué FCI se elija, ya que cada banco tiene sus fondos comunes de inversión”, según señaló Trapé. Es posible acceder a los mismos por home banking, en la sección “inversiones” (varía según cada banco).
“Lo que hay que tener en cuenta es que el medio aguinaldo va a venir bastante retaceado comparado con los años anteriores para los tres sectores de la economía en cuanto al mercado laboral: la administración pública lo recibirá a partir de septiembre y en partes; el sector privado todavía negocia cómo lo recibirán y si habrá una ayuda nacional de por medio; y el sector informal y el independiente, no lo cobran. Así, nos tendríamos que enfocar casi exclusivamente en el sector privado y quienes lo puedan recibir, probablemente lo destinen al consumo del mes, o comprarán dólares, en la medida en la que puedan, ya sean los u$s200 vía home banking, como se ha venido viendo en los últimos 60 días”, destacó José Vargas, titular de Evaluecon.
Para el economista, la cotización oficial reprimida, y la inflación en también, por la falta de consumo hacen que la mejor opción sea resguardarse en dólares.
“Estimo que tampoco habrá inversiones, por más mínima que sea en bienes durables o semidurables para quienes cobren el medio aguinaldo por la incertidumbre sobre lo que pasará con la economía en los próximos meses, por lo que lo más probable es que queden resguardados en una moneda dura como es el dólar”, cerró José Vargas, titular de Evaluecon.
Plazo fijo
El Banco Central de la República Argentina elevó a principios de junio la tasa mínima para remunerar a las imposiciones en plazos fijos al equivalente a 79% de la tasa de política monetaria Leliq.
Así, subió de 70% a 79% de la tasa Leliq la remuneración de los plazos fijos. Significa para los ahorristas, sin importar el volumen o razón social, una Tasa Nominal Anual de 30,02% (TNA) y una Tasa Efectiva Anual de 34,52% (TEA). No obstante, la inflación esperada para los próximos 12 meses según el Relevamiento de Expectativas de Mercado de la Autoridad monetaria supera el 50%, por lo que, a largo plazo, la tasa sería negativa.
Pagar deudas
Cancelar las tarjetas de crédito y reducir la mayor cantidad de obligaciones mensuales siempre es una buena opción. No se trata de una forma de ahorrar, o ganar dinero, pero sí de evitar sobresaltos futuros.
El Banco Central lleva adelante una política de reducción de la tasa de interés para el financiamiento del saldo de las tarjetas de crédito. En marzo se estableció un tope de 55% que luego bajó a 49% y a 43% en mayo, con la eliminación de los intereses punitorios. Pero igualmente el pago mínimo de la tarjeta tiene un costo alto que es mejor evitar.