Echaron a un sobreviviente de cáncer de un restaurante de Carolina del Sur porque "su cara estaba asustando a los otros clientes". El hombre dijo que estaba comprando donas cuando fue empujado hasta la oficina de la gerente.
Kirby Evans, de 65 años, es un sobreviviente de cáncer de piel. Hace 7 años los médicos debieron extirparle el ojo izquierdo y la nariz para poder salvarle la vida.
Si bien, en la actualidad está completamente curado, no puede costear una cirugía reconstructiva y tampoco puede usar un parche. Sin embargo, su aspecto no le había impedido continuar con su vida habitual.
Según contó Evans a la ABC News 4, el 10 de octubre pasado estaba comprando donas en un local de Carolina del Sur cuando fue llevado a los empujones hasta la oficina de la gerente del lugar.
La mujer le exigió que se tapara el rostro o que se fuera, porque su aspecto estaba asustando a los demás. "Las palabras que salieron de su boca me lastimaron profundamente", dijo el hombre.
Ante esto, Evans se retiró del local llorando y le contó a su hija lo que había pasado. La mujer se indignó con la situación y decidió compartirla en Facebook.
"Se fue a casa llorando para contarme lo que sucedió. Mi padre es un superviviente del cáncer y perdió su ojo izquierdo y su nariz debido a esta horrible enfermedad. Fue discriminado por su aspecto. No puede evitar lo que el cáncer le hizo. Mi padre es el hombre más fuerte que conozco, pero cuando me contó lo que le sucedió, vi cómo le salían las lágrimas. Me duele verlo herido así", lamento la mujer en la red social.