Dwayne Douglas Johnson, alias “The Rock”, nació en Hayward, California, en 1972. Su madre provenía de la aristocracia, por lo que el rey de Samoa, Malietoa Tanumafili II, le otorgó en 2004 el título nobiliario de Seiuli. Durante la secundaria se hizo aficionado a los deportes, sobre todo al fútbol americano. Su desempeño era tan bueno que recibió becas de universidades para jugar en sus equipos y así fue que eligió la Universidad de Miami.
Fue miembro del equipo de Campeonato Nacional de la NCAA, los Miami Hurricanes, en 1990. De hecho, en “Rápidos y furiosos 7”, en la escena en que su personaje Hobbs está mirando un partido en la televisión, es un partido real donde él mismo aparece jugando con el número 94. Se graduó en 1995 como Licenciado en Criminología y Fisiología e iba a seguir una carrera en la NFL (National Football League) pero una lesión en la espalda terminó con su sueño. Su padre, Rocky Johnson, era luchador profesional y la WWE (World Wrestling Entertainment) se interesó por Dwayne. Así comenzó su carrera como luchador profesional en la que ganó diez campeonatos mundiales, entre muchas otras cosas.
Sus primeras apariciones en la televisión fueron en series o películas que tenían que ver con la lucha libre y de a poco comenzó a ser invitado en programas como “That ‘70’s Show” (1998-2006) y “Star Trek: Voyager” (1995-2001).
Su primer rol en cine fue un breve papel como el Rey Escorpión en “La momia regresa” (2001) y Hollywood puso sus ojos en él. Rápidamente comenzaron a llover las ofertas y lo demás es historia. Se retiró en 2004 de la WWE para concentrarse en su carrera como actor, pero la marca “The Rock” sigue vigente y, cada tanto, hace presentaciones especiales.
-¿Qué te atrajo de "Terremoto: la falla de San Andrés"?
-Era la oportunidad de hacer una película de este género y me encantó el guión después de leer las primeras 30 páginas. Era un gran espectáculo de desastres, pero contado desde el punto de vista de un hombre tratando de cuidar a su hija y ayudar a su familia a sobrevivir. Es el elemento humano que siempre me mueve y me pareció que la humanidad en el guión era muy convincente. Al mismo tiempo, es esta enorme y fascinante experiencia implacable.
-Interpretás a Ray, un piloto de helicóptero de búsqueda y rescate. ¿Qué te gusta del personaje?
-Ray es un buen hombre con grandes cualidades que ha luchado para equilibrar su familia con su trabajo como piloto de rescate para el LAFD (Los Angeles Fire Department). Lo que me gustó de él fue el hecho de que en silencio hace su trabajo sin ser jactancioso. No habla de más. Sentí que tuve la suerte de encontrar un personaje así en una gran película de acción como ésta.
-Pero Ray es puesto a prueba en el film…
-Sí, él soporta el terremoto más grande que se haya registrado en California. Pero no hay nada en el agua, la tierra o el aire que Ray no maneje u opere con tal de llegar a su hija. En el núcleo de su viaje en esta película está la relación con su ex esposa Emma y también la que tiene con su hija Blake, que se encuentra atrapada en San Francisco cuando sucede el terremoto. Así que somos testigos de este espectáculo a través de sus ojos, y también de un científico, interpretado por Paul Giamatti, que encontró una manera de seguir el movimiento del sismo al predecir donde va a golpear la próxima vez.
-¿Qué podés decirnos sobre la relación que tiene Ray con Emma y Blake, interpretadas por Carla Gugino y Alexandra Daddario respectivamente?
-La relación con su hija es un poco mejor que la que tiene con su ex mujer, aunque todavía hay mucho amor allí. Cualquier persona que firma para casarse no firma para divorciarse, pero la vida sigue. Así que tienen una relación respetuosa. Lo que es interesante es que, ante este gran peligro y calamidad, ambos se dan cuenta de que algunas cosas que ellos pensaban que eran importantes no lo eran realmente después de todo. Porque no son sus temas lo que importa ahora sino su hija. Ray y Emma en realidad tenían dos hijos, pero vamos a saber a través del curso de la historia que Ray perdió hace años a una hija durante su guardia. Hay algo psicológico muy interesante que pasa con un hombre cuyo trabajo consiste en salvar vidas, pero que no pudo salvar a su propia hija. Así que, básicamente, hará cualquier cosa para no dejar que eso suceda de nuevo...
-Ray haría cualquier cosa para proteger a su familia y seres queridos. ¿Te identificás con él en ese aspecto?
-Sin lugar a dudas. Haría cualquier cosa y todo lo que fuera para mantener a mi familia y seres queridos a salvo.
-¿Qué fue lo que hiciste para prepararte para este papel?
-Tuve la suerte de pasar algún tiempo con los bomberos de LAFD y también con una gran cantidad de pilotos de helicópteros de rescate en Australia mientras estábamos filmando en Gold Coast. Siempre vi a los rescatistas como héroes anónimos y gente muy especial, porque cuando todo el mundo está huyendo del peligro ellos corren hacia él.
-¿Qué te dejó el haber pasado tiempo con estas personas que hacen este tipo de trabajo día tras día?
-Además de los detalles de la forma de operar y volar estas máquinas, lo más importante, la mentalidad de estos hombres, que son increíbles. No estoy hablando sólo de lo valientes que son, sino también de la forma en que son capaces de separar sus emociones de los peligros que enfrentan. Tienen un ADN especial y, después de conocerlos, me fui con un mayor nivel de respeto por lo que hacen. Los admiro totalmente.
-¿Cómo esa experiencia te ayudó para formar al personaje?
-No estoy seguro de si alguna vez vuelva a personifica a un personaje como Ray, que encarna todas estas cualidades muy especiales. Tuve la suerte de llegar a hacerlo en esta película y todos los días me fui del set humildemente. También me gusta que Ray tiene mujeres fuertes alrededor, a las que ama y respeta.
-Hablando de mujeres fuertes, ¿qué podemos decirnos de Carla Gugino, que personifica a Emma?
-Esta es nuestra tercera película juntos. Carla es única debido al peso y seriedad que le da a todas sus actuaciones, especialmente ésta. Ella es muy especial y pone tanto corazón en todo lo que hace. No puedo decir demasiadas cosas buenas sobre ella. No me alcanzan las palabras.
-¿Qué creés que Alexandra Daddario le brinda a Blake?
-Alexandra no sólo es hermosa, ella también es extremadamente simpática. Se necesita un delicado equilibrio para hacer de alguien que es tan valiente e ingeniosa como Blake, pero al mismo tiempo mostrar la vulnerabilidad y Alexandra lo logró. La audiencia va a apoyar a Blake en esta película.
-¿Te involucraste en mucha acción filmando en Australia?
-Me involucré en muchísima cantidad de acción, pero fue diferente de otras películas que he hecho en que era implacable. Además, tengo un gran doble de riesgo, pero yo quería hacer todo precisamente porque gran parte de la acción se realizó haciendo escenas con primeros planos. Por lo tanto, supongo que estaba tan loco como para hacer eso...
-Entonces, cuando te vemos haciendo escenas peligrosas, ¿no tienen efectos visuales?
-Utilizamos efectos visuales para aumentar y extender una toma. Cuando me ven en un barco en la bahía de San Francisco, es porque yo realmente estaba allí. Incluso construimos tres plantas de un edificio a escala y los sumergimos en un tanque.
-Trabajaste antes con el director Brad Peyton. ¿Qué cualidades le aporta a la película?
-Tenía el hambre necesaria para crear una película épica en 3D que también podría redefinir cómo se hacen este tipo de películas. Eso requiere de un director con la visión correcta y con un conocimiento sagaz. Brad sabe cómo captar a la audiencia y sumergirlos en la acción, pero nunca pierde de vista el elemento humano. Experimentás este enorme espectáculo a través de los ojos de estos personajes mientras luchan por sobrevivir y proteger a las personas que aman.
-¿Qué podemos esperar de la película?
Creo que va a ser increíble. ¡Y esperen a verla en 3D!