La “Catedral” del básquetbol sonríe. Cómo lo hizo en 1995, 2001 o 2006, el Rojo de la Sexta vuelve a escribir su nombre en el libro de oro de los campeones.
Fue el mejor de la temporada sin lugar a dudas. a pesar del traspié en el Clausura, logró reponerse y fue el dueño absoluto del 2017, tras derrotas a Atenas por 66-57.
Un primer cuarto a pedir de la garra Apache. Defensa fuerte sobre el perímetro y adentro de la zona pintada. Al Rojo de la Sexta este juego le duele y mucho y lo sintió. Iban 5 minutos de juego y ganaba Atenas por 10 puntos: 12-2.
El goleó de Griffa era el espectáculo de la noche (decena de puntos con dos triples). Sin embargo, comenzó a reaccionar el quinteto de Walter Gutiérrez a través de ciertas individualidades, pero estaba en deuda con el juego colectivo. Por esta razón, el Apache ganó el primer parcial por siete puntos: 17-10.
En el segundo capítulo la historia se emparejó. Entró en acción el banco de relevos de Anzorena, Martín Irrutia, Nacho Garitoandía y Juan Luca Hernáez, quienes le dieron buenos dividendos en defensa, como así también y en cada ataque en transición o fijo. Atenas, solamente dependió del goleó de Griffa.
El cordobés convirtió los 8 puntos de su equipo. El resto se enemistó con el aro. Anzorena se puso en juego por los contragolpes y los puntos en segundas oportunidades.
Muy errático en triples, abusó demasiado de ese lanzamiento y las estadísticas fueron deprimente: lanzó 10 triples y no convirtió. Pero la apuesta de mover el banco a Gutiérrez le fue satisfactorio y antes del descanso largo, su equipo estaba: 25-24 abajo.
En el tercer parcial, lo mejor de Anzorena en estos juegos finales. Defensa fuerte, al límite y muy inteligente para jugar cada avance estacionado.
Apareció el goleó de Irrutia (8 puntos), pinceladas del ‘Colo’ Aguilera, la entrega de Hernáez y Revellino y la presencia de Estalles. Por esta razón, el Rojo entró al último capítulo con una ventaja de ocho puntos: 38-46.
En el último cuarto, una cátedra de actitud por parte de Aguilera y Estalles. El Rojo sacó a relucir su juego y fue superior a un Atenas que nunca se entregó, que en el cierre tenía en Nesci a su abanderado, pero ante el potencial colectivo del equipo de la Sexta, nada pudo hacer. La Asociación
Deportiva Anzorena volvió a gritar campeón, fue su objetivo que se trazó en el 2017 y lo cumplió con creces. LA BOUTIQUE DEL BASQUET, SONRÍE.