Daniel E. Nijensohn nació y creció en Mendoza, realizó sus estudios en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Cuyo, y luego de especializarse en Buenos Aires se desempeñó como neurocirujano en diversos lugares del mundo estableciéndose finalmente en Estados Unidos, donde ha sido reconocido en varias oportunidades como uno de los mejores médicos en su especialidad a nivel local y nacional.
En 1955, militares realizaron placas de rayos X al cuerpo embalsamado de Eva Duarte de Perón, que más de medio siglo después serían estudiadas por el Dr. Nijensohn y su equipo llegando a la conclusión de que uno de los personajes más emblemáticos de la cultura política argentina había sido lobotomizada antes de fallecer.
“Las lobotomías, en aquella época, eran indicadas en tres casos: para controlar enfermedades psiquiátricas, para aliviar el dolor producto de una enfermedad terminal y para controlar la personalidad y los comportamientos violentos” (…) “Infelizmente, la cirugía por este último motivo, era ampliamente realizada en los servicios penitenciarios norteamericanos, y también en muchos países como método aplicado a disidentes y presos políticos”, afirma el especialista.