Corriendo sobre las verdes cornisas, a máxima velocidad, en el monte Tamalpais, en California. La primera carrera de descenso (downhill), en octubre de 1976, comenzaría a darle forma a una especialidad del mountain bike que había nacido por la pericia de un grupo de amigos.
Pioneros que subían a la montaña y se lanzaban por los caminos amplios y rocosos en Marin, llamando a su aventura “repack”. Entusiastas que acondicionaron sus bicicletas Schwinn (estilo cruiser) con llantas anchas, desnudas de sus guardabarros, adaptándole palancas de freno de moto e integrados en las masas... con el tiempo -para ganar aún mayor velocidad- le fueron añadiendo cambios y también multiplicaciones.
Audaces, intrépidos, aventureros que cultivaron la semilla del mountainbiking, parara darle paso a los primeros héroes de la disciplina. Jimmy Deaton (medalla de plata en el Mundial de MTB de 1992) comenzó su periplo -en la década del ‘80- en la actividad con una bicicleta de BMX, pantalones de jeans, una remera de mangas largas y un casco (como los de cross) por seguridad.
De la palabra repack, que se acuñó en los ‘70s, el Downhill (DH), fue tecnificándose. En 1990, el suizo Phillipe Perakis usó por primera vez protecciones por todo el cuerpo marca Dainese. La gente le veía extraño. al subcampeón Europeo de MTB (1989) por su indumentaria lo apodaron Bugman (hombre insecto).
Se reglamentaron los circuitos, los saltos, los obstáculos tanto naturales como artificiales, la dificultad técnica que deben afrontar los riders, las tomas de tiempo individuales,.. aquella iniciativa de un grupo de amigos trascendió las fronteras. Se fue universalizando para convertirse en una modalidad regida por la Unión Ciclística Internacional (UCI); con su calendario de competencias y un ranking estelar.
El descenso también reservó el derecho de reclamar su récords de velocidad. El 13 de diciembre de 2016, en el desierto de Atacama (en Chile), el austríaco Markus Stöckl logró una nueva marca: lanzarse a 4.000 metros de altura para cruzar en 11 segundos (a una velocidad de 167.6 km/h) los 1.200 metros de arena (en una pendiente 45 grados), con una bici estándar de mountain bike.
Mountain bike DH
Las Bicis de DH son más pesadas y más fuertes que las otras bicicletas de montaña. Tienen suspensión en la horquilla delantera y trasera con más de 8 pulgadas (20 cm) de recorrido, para copiar mejor el terreno y deslizarse rápidamente sobre las rocas y las raíces de los árboles. Suelen tener frenos a disco y en la actualidad se utilizan llantas de 29 pulgadas con neumáticos más gruesos para no perder tracción.
En las carreras, dependiendo del formato, los pilotos tienen un intento o dos para llegar a la meta (cronometrando su mejor serie). Los pilotos deben elegir su línea de marcha en un circuito encintado. Si un piloto abandona el curso o rompe la cinta debe regresar al punto de salida. Las reglas de la disciplina es de la Unión Ciclística Internacional.