Cumplieron con los presentes. Si uno esperaba un amistoso más de esos típicos de pretemporada, donde sobraban las imprecisiones y los errores, lejos estuvo de acertar.
El encuentro fue emotivo de principio a fin, con algunos roces y protestas que encendieron aún más la agradable jornada en cancha del Celeste.
Pizarro comenzó a enrojecer las gargantas con dos goles de gran factura. El primero fue un remate de media distancia que dejó a Tobar sin respuestas. El segundo llegó tras una genialidad de Joselito Ortiz, quien cedió para que el goleador empujara a la red.
“No tuvimos la pelota durante los primeros 30’ del primer tiempo y no estuvimos bien parados”, dijo después Videla, DT granate, acerca del mal juego de su equipo.
Fue en desventaja cuando apareció el combinado del Bajo. Crecieron en rendimiento los volantes y Chávez apareció con una pirueta magistral para descontar. Sobre el cierre de la etapa, Martínez, eterno goleador, puso la cabeza y el empate parcial.
Sin embargo, la mañana venía repleta de sorpresas y un mal rechazo de Ojeda se coló en su propia valla. Apenas había iniciado el complemento y otra vez ganaba Gutiérrez.
Fue el Tanque Martínez quien empató el marcador una vez más (¡otra vez de cabeza!). A esa altura, Scivoletto se volvía loco cada vez que Gutiérrez tenía una pelota parada en contra.
Lucero aprovechó un buen centro de Díaz y parecía que finalmente se lo llevaba el local, pero sobre el final apareció Pulgar para decretar la igualdad definitiva y dejar a los dos con sensaciones encontradas.
Por ahora, Gutiérrez y Luján arrasan con su ofensiva, pero atrás...