Dos policías que estaban patrullando fueron heridos de bala por dos delincuentes en un enfrentamiento que tuvo como escenario la bodega Filippini de Godoy Cruz. Uno de los policías salvó su vida de milagro: una bala le rozó la cabeza.
El hecho sacó de la tranquilidad matinal a los vecinos del barrio Huarpes I, ya que luego del tiroteo se produjo un rápido e intenso operativo para dar con los delincuentes, que incluyó la participación de efectivos de Cuerpos Especiales y uno de los helicópteros del ministerio de Seguridad.
Cerca de las 9.30, dos efectivos a bordo de un móvil policial patrullaban en las inmediaciones de las calles Roca y Rawson de Godoy Cruz cuando divisaron a dos hombres que se detuvieron en seco al verlos.
Los dos delincuentes salieron corriendo e ingresaron a las instalaciones de la vieja bodega. Los uniformados los siguieron, se bajaron del auto e ingresaron al lugar, con sus armas desenfundadas.
Fue allí que se produjo una balacera entre ambos bandos que dejó como resultado un policía herido en un pierna y otro en la cabeza, pues una bala le rozó el cuero cabelludo.
Luego de que los heridos comunicaran la novedad al CEO, se inició un importante operativo policial pero los dos tiradores lograron escapar.
Según explicó el comisario Roberto Munives, jefe de la Policía, uno de los agentes baleados habría logrado herir de bala a uno de los sujetos.
"Hay unas marcas, como un revolcón, y quedó un arma calibre 38 con un solo proyectil. Creemos que se le cayó cuando fue herido", explicó el jefe policial, quien llegó al lugar minutos después del hecho para supervisar las acciones.
Hospitalizados
El policía herido en la pierna fue derivado a la Clínica Francesa y su compañero, derivado a la guardia del hospital El Carmen en el departamento de Godoy Cruz.
"Los dos están bien, ninguno resultó herido de gravedad", indicó Munives, mientras personal de Policía Científica trabajaba dentro de las instalaciones de la vieja bodega abandonada.
"Nuestros policías enfrentan las situaciones de peligro y esa es la actitud que nosotros queremos que tengan para enfrentar el delito", afirmó el comisario, alentando a sus subordinados.
Mientras tanto, los vecinos del barrio Huarpes I miraban el operativo policial y preferían no hablar con los medios de prensa que llegaron para cubrir las circunstancias del caso.
