Como el año pasado, la lluvia fue testimonio de la presentación de Abel Pintos en la apertura del festival rivadaviense, frente a 20 mil espectadores.
Pasada la medianoche, nadie se movió de sus lugares en la platea, pero el show terminó antes de lo previsto.
Desenvuelto, muy cómodo en el escenario, Abel dejó ver su parte más showman (algo que no le gustó a varias de sus seguidoras) y no dejó de cantar sus hits; “Aquí te espero”, “Cómo te extraño”, “Pájaro cantor”, “La llave” e hizo una versión homenaje a León Gieco, “Pensar en nada”, “Revolución”, para terminar ya (por motivos climáticos) con un fragmento de “Motivos”.
El miércoles fue la noche tropical. Aquí el público se duplicó, y se lucieron Ulises Bueno - con material de su reciente disco Creo- , La Re Pandilla, el Loco Amato y Chipote, quienes convirtieron a la platea en una pista de baile hasta las 3 de la mañana.
El jueves, La Beriso inundó de rock Rivadavia. La banda liderada por Rolo Sartorio rompió un récord: es la banda que más gente convocó en la noche de rock en los 32 años del festival.
Cuando sonaron los primeros acordes de “Legui”, tema que abre el último trabajo de la banda, Pecado Capital, todo Rivadavia comenzó con esa comunión berisera. y que no paró en las dos horas que duró el show.
Después llegaron varios temas más de la misma placa. La conexión con el público fue muy fuerte, al punto que Rolo aseguró: “Una vez dijimos que nuestra segunda casa es Mendoza, el problema es que todavía no nos hemos mudado”, y eso el aplauso. La recta final fue a puro hit: “Madrugada” y “Traicionero”, entre otros.
Después del show, Sartorio habló a solas y en exclusiva con Los Andes y confirmó el afecto que siente por esta provincia: “Siempre nos trataron muy bien, nos sentimos muy cómodos en Mendoza. Estamos disfrutando el momento que nos toca vivir, tenemos más de 100 fechas al año y se vienen giras por Europa y México”, anticipó.
Axel cerró la cuarta jornada de Rivadavia Canta al País con una catarata de clásicos, que unieron en un abrazo masivo a las más de 10 mil personas que colmaron el predio del este.
No sólo sonaron hits como "Celebra la vida" y "Tu amor por siempre", sino que hubo espacio para repasar Ser, su último álbum. Tras el show, Axel también habló con Los Andes y contó estar muy agradecido por cómo la gente recibió su último trabajo. "Estoy muy agradecido, emocionado y contento. Siempre hay un cariño espectacular en Rivadavia. Es posible regresar a fin de año. Es una ciudad muy linda.
Volveremos en algún momento”. El mismo viernes actuaron Los Huayra.
Los ritmos del carnaval norteño se apoderaron de la noche del sábado con Los Tekis, con algo más de 5 mil personas. Ellos compartieron el escenario con el trío Destino San Javier y Leandro Lovato.
El domingo también se cerró con un marco de gente, ya que La Barra se mantiene vigente ante su público. Con un recorrido por su extensa discografía, la "Pepa" Brizuela hizo que Mendoza bailara otra vez al ritmo del cuarteto.
También hay que destacar la actuación de Coti, autor de grandes hits de los últimos 10 años y eso se vio reflejado en la gente que cantó todo lo que tocó. También se le dio lugar a Mano Arriba. Esta banda uruguaya metió sus dos éxitos y después hizo un popurrí de cumbias clásicas.
Un dato para tener en cuenta fue la presencia de los artistas locales, quienes tuvieron su oportunidad y la aprovecharon, ya que fueron muy bien recibidos.
Este año, más de 100 mil personas pasaron por el predio municipal. La noche de mayor convocatoria fue el miércoles, con la presencia de Ulises Bueno y La Re Pandilla (más de 40 mil personas), aunque también tuvo una buena cantidad de gente cuando tocó La Beriso y el domingo por la noche.
El Festival Nacional de la Tonada convocó a unas 110 mil personas y el buen tiempo acompañó
El público gritó, abucheó y aplaudió a más no poder y los locutores ya no pudieron seguir resistiendo la llegada de un nuevo tema de la banda mendocina Los Chimeno.
Era la noche del sábado a orillas del río Tunuyán y el mismo cuadro de entusiasmo popular por el folclore se vivía en la Peña del Festival y hasta en los mini escenarios que montaron algunos restaurantes del patio de comidas.
Valletanos y turistas ratificaron una vez más que la música cuyana goza de muy buena salud. Unas 110 mil personas pasaron por el predio tunuyanino las cuatro noches que duró el Festival Nacional de la Tonada. Cantaron, saltaron y se emocionaron junto a bandas locales y nacionales.
Los Nocheros, Los Huayra, Los Tekis, Luciano Pereyra, Destino San Javier, Nahuel Pennisi fueron algunos de los artistas que convocaron desde el escenario tonadero.
Después de varios años en que este encuentro musical estuvo signado por las tormentas o sus amenazas (en 2015, casi termina en tragedia), en la 36° edición del festival el buen clima y la luna brillante fueron una de las grandes noticias.
“¡Está genial! Ni siquiera tuvimos que bajar los abrigos, porque no hace el frío típico de las noches de aquí”, comentó Armando López, mientras acomodaba las reposeras y el equipo de mate junto a su mujer para disfrutar del show.
“¡Qué placer estar acá! Estoy feliz de poder compartir con ustedes. ¡Hoy no le vamos a dejar a la lluvia que nos apague la fiesta!”, gritó al presentarse Luciano Pereyra y la olla tonadera estalló en gritos. El año pasado, su show debió cancelarse debido a un aguacero.
Esta vez, el intérprete de Sin testigos tuvo la responsabilidad de abrir la programación de Tonada. Salió a escena el jueves, después de la Vendimia Carrusel de Sueños, y durante casi dos horas conquistó a unos 35 espectadores en la noche de taquilla liberada.
“El viernes es siempre un día tranqui, pero esta vez nos sorprendió. La verdad es que todas las noches el predio estuvo repleto, tanto en el escenario mayor como en la Peña, que es cada vez más elegida por los jóvenes y los bailarines”, expuso entusiasmado el intendente Martín Aveiro.
El funcionario aseguró que unos 35 millones de pesos ingresaron al departamento por turismo, alojamiento, comercio y otros rubros gracias al festival.
El humor de Cacho Garay, el espectáculo más intimista de Jorge y Pocho Sosa, todo el color norteño de Las Voces de mi Tierra, el abrumador ritmo de Los Tekis, la tonada de Raimundo Chimica González y el éxito en ascenso del trío Destino San Javier hicieron del viernes un espectáculo imperdible.
El cierre del sábado, con una olla que hervía al ritmo de más de 40 mil personas, estuvo a cargo de Los Huayra. Con su calidez y buena calidad artística, la banda salteña conquistó a locales y turistas, e incluso se dio el lujo de invitar a escena a otros artistas de la noche, como Nacho Silva.
También se destacaron esa noche Los Trovadores de Cuyo, quienes ratificaron el fervor del público por la cuyanía. A su manera, también lo hicieron Los Chimeno (entre los más ovacionados) y las tunuyaninas Abraham con sus Sonidos del Quetec, entre muchos otros.
La última “luna” de Tonada, el domingo, tampoco tuvo desperdicio, con un menú para todos los gustos. Los Igualitos, Los Cantores del Alba, la murga La Buenamoza, Los Nocheros y la alegría inconfundible de Algarroba.com, entre otros, sembraron entusiasmo y energía en lo que fue el gran cierre.
Quizá la gran revelación este año fue Nahuel Pennisi, a quien el público despidió de pie y con ovación. El joven ciego había participado otros años del Festival, pero en esta edición logró cautivar a Tunuyán como nunca.
“Es una de las músicas más poéticas y de una riqueza cultural enorme”, dijo respecto de la tonada y sorprendió con su voz y sus dotes de gran guitarrista. Incluso, Los Nocheros lo invitaron a tocar con ellos la canción final.