Un espectáculo digno de admirar podrá apreciarse en el cielo de mendocino el próximo martes 2 de julio. Se trata de un eclipse de sol, fenómeno que ocurre cuando la luna -en su órbita alrededor de la tierra- pasa entre nuestro planeta y el sol proyectando sombra sobre la tierra. Si bien será total, en la provincia solamente se podrá observar en un 96%, es decir, que no se verá a la gran estrella desaparecer por completo, sino que quedará una pequeña fracción luminosa. Distinto es el caso de San Juan, San Luis, el sur de Córdoba, el sur de Santa Fe y el norte de Buenos Aires donde por dos minutos la oscuridad reinará por completo.
Científicos locales, invitan a la sociedad a disfrutar el fenómeno que se desarrollará en poco más de un mes, pero a su vez buscan concientizar sobre la correcta forma de hacerlo para evitar daños en la vista. "En Mendoza el eclipse será parcial pero bastante importante ya que el sol va a estar cubierto en un 96%, por lo que quedará un 4% descubierto, lo que es suficiente para que no se haga de noche", comenzó a explicar Beatriz García, doctora en Astronomía e investigadora del Conicet.
Para ella es fundamental que la gente pueda apreciarlo con seguridad y cuidando de no lastimarse la vista. "Lo que recomendados es observarlo por proyección y nunca directamente a ojo descubierto porque se daña la retina", continuó. Aclaró que no sirven las placas radiográficas, ni los lentes de sol convencionales, ni las placas de polarizado de los autos. "Si uno lo quiere mirar directamente tiene que usar filtros que estén certificados. Se pueden usar los vidrios que se utilizan para soldar, pero no con el filtro normal que tiene una graduación de 10 porque es muy bajo. Hay que buscar por encima de los 12, los que son muy difíciles de conseguir", señaló la experta. También pueden utilizarse anteojos con filtros de reflexión, que emplean mylar de grado óptico, una lámina de plástico con un depósito metálico que refleja fuertemente la luz. En ese sentido, explicó que mirarlo directamente, de reojo o utilizando elementos inadecuados produce daños irreparables. "Probablemente la persona no se dé cuenta el día del eclipse, pero con el tiempo empiezan a aparecer las huellas", aseguró la investigadora del Conicet.
García aclaró que ese día el sol no estará particularmente más peligroso, sino que lo que afecta la salud humana es fijar la vista en esta estrella durante un periodo prolongado. "Siempre es nocivo mirar el sol. La gente piensa que lo mira habitualmente, pero si lo hace es sólo un vistazo que no dura más de unos segundos. El problema es que el eclipse invita a quedarse mirando por varios minutos, por lo que la gente corre el riesgo de estar expuesto más tiempo de lo que el ojo resiste", manifestó. Por esa razón, indicó que no hace falta encerrarse en la casa para evitar todo contacto. "Hay que participar del evento pero con los elementos adecuados ya que es uno de los fenómenos astronómicos más lindos y de gran importancia científica", subrayó.
Día y horario
García precisó que el máximo de parcialidad del eclipse del próximo 2 julio será a las 17.39 y que durará aproximadamente 2 minutos. A su vez aclaró que a la luna tocará el sol y empezará a cubrirlo una hora antes. Por la época del año el sol estará levemente sobre la cordillera. "En la ciudad de Mendoza el sol estará entre unos 2 ó 3 grados por arriba de la Cordillera muy cerca del poniente", precisó. Por esa razón la doctora en astronomía aconseja en Mendoza tratar de buscar un lugar alto para verlo, como la terraza de un edificio. "Si tienen la posibilidad de ir a un lugar hacia el oeste cruzando el piedemonte mucho mejor", comentó. La investigadora informó además que hay dos eclipses de sol y dos de luna por año, pero que no siempre se ven en Argentina.
Tal como detalló Santiago Paolantonio del Observatorio Astronómico de Córdoba, en un documento que elaboró para difundir información sobre el fenómeno del 2 de julio, "el último eclipse total de sol que pudo ver desde territorio continental argentino ocurrió el 13 de noviembre de 2010 (…). Uno anterior tuvo lugar el 3 de noviembre de 1994, con una mejor visibilidad desde el norte argentino, hace ya un cuarto de siglo".
Propuesta para escuelas
Para que los alumnos mendocinos puedan disfrutar del eclipse total de sol el próximo 2 de julio sin correr riesgos, la doctora en Astronomía Beatriz García realiza capacitaciones en distintas escuelas. Lo que ella recomienda, tanto para estudiantes como para observadores en general, es construir este tipo de cámara oscura para lo que se necesitan unos pocos materiales: un tubo de cartón de más de un metro y de entre 6 y 7 cm de diámetro (como los que utilizan la sederías para enrollar las telas), papel de calcar y papel aluminio. "En un extremo del tubo se coloca el papel de calcar y en el otro el papel aluminio. Se le hace un pequeño orificio al aluminio con un clavito y este extremo se apunta al sol", detalló. Con este instrumento aparecerá la imagen del sol proyectado sobre el papel de calcar por lo que se evita mirarlo directamente. Las escuelas interesadas en obtener información del fenómeno pueden escribirle a la experta al mail beatrizgarciautn@gmail.com o llamarla al celular 2615070816.
100 años: día histórico para la ciencia
Un día como hoy pero hace 100 años se produjo uno de los eclipses de sol más importantes de la historia, ya que permitió corroborar una de las predicciones de la Teoría de la Relatividad General planteada por el físico Albert Einstein. Este fenómeno tiene además una gran relación con el país, ya que astrónomos de Argentina estuvieron a punto de participar de la comprobación, pero finalmente no pudieron hacerlo por falta de fondos.
Tal como se relata en el texto "Intentos argentinos para probar la Teoría de la Relatividad" de Santiago Paolantonio y Edgardo R. Minitti del Observatorio Astronómico de la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina; Einstein convenció al doctor alemán Erwin Freundlich para que lo ayudara a verificar su teoría y este le pidió cooperación al estadounidense radicado en Argentina, Charles Dillon Perrine, director del Observatorio Nacional Argentino (ONA). Se dispusieron a hacerlo en el eclipse del 10 de octubre de 1912 que ocurriría en Brasil. "Con instrumentos especialmente diseñados y construidos en Córdoba se concretó la expedición del ONA. Dado que la lluvia hizo fracasar las observaciones, se realizaron dos nuevos intentos: en 1914 (Teodesia, Ucrania) y en 1916 (Tucacas, Venezuela). Nuevamente en ambas oportunidades, el mal tiempo impidió obtener imágenes fotográficas utilizables. A pesar de haber planificado la presencia en el eclipse de 1919 en Brasil, el Observatorio estuvo ausente en el eclipse en que finalmente las condiciones climáticas fueron las adecuadas para lograr las imágenes que confirmarían la predicción de la célebre Teoría de la Relatividad", tal como se detalla en el artículo.
"Es bien interesante saber que Argentina estuvo involucrada en los primeros intentos de probar la teoría de la relatividad que surgió varios años antes", aseguró la doctora en Astronomía e investigadora del Conicet, Beatriz García. "Lamentablemente en 1919 cuando ya estaba preparada la expedición hubo un problema de fondos por lo que la gente se tuvo que quedar en Argentina y no pudo viajar a Brasil", añadió. De todas formas la experta remarcó que el eclipse fue muy importante porque permitió demostrar la capacidad que tiene la ciencia para diseñar y pensar experimentos que puedan corroborar y verificar teorías científicas. Fue tal la importancia de ese eclipse, que se reflejó en las páginas de este diario tanto el 13 de abril como el 28 de mayo de 1919.