En la reanudación de los ataques aéreos a Gaza, Israel mató hoy a 11 palestinos, entre ellos la esposa y el hijo de 7 meses del líder militar de Hamas, Mohamad al Deif, en lo que el grupo calificó como un intento de asesinato de su jefe luego de que ayer se rompiera la frágil tregua de 24 horas pactada entre ambos.
Tras acusar a Israel de llevar las conversaciones a un callejón sin salida, Hamas lanzó ayer cohetes en el sur de Israel y uno contra Tel Aviv, sin que se registraran víctimas.
Un militar israelí dijo que la aviación había llevado a cabo 60 ataques en la Franja de Gaza desde que las hostilidades se reanudaron ayer, y que los palestinos lanzaron más de 80 cohetes, algunas de ellos interceptados por el sistema antimisiles de Israel.
Los ataques pusieron fin a un período de 10 días de calma, la pausa más larga de la lucha desde que Israel lanzó su ofensiva en Gaza el 8 de julio.
El Ministerio de Salud palestino elevó la cifra de muertos en la Franja de Gaza a 2.029 personas, la mayoría civiles, mientras que cerca de 425.000 personas fueron desplazadas en un territorio de 1,8 millones de habitantes.
En tanto, 67 israelíes murieron, tres de ellos civiles en la guerra más mortífera y destructiva entre Hamas e Israel desde que Tel Aviv se retiró unilateralmente de Gaza en 2005.
Hamas acusó a Israel de querer asesinar a su jefe, considerado el cerebro de la operación militar subterránea del grupo islamista, intento de asesinato que fue justificado por la ministra israelí de Justicia, Tzipi Livni.
"Intentar matar a una persona que está involucrada en terrorismo no es sólo legítimo sino deseable a mis ojos. Durante todo este tiempo, he apoyado matar a los líderes terroristas", subrayó Livni.
"Estoy convencido de que si había información de que Mohamad al Deif no estaba dentro de la casa, no habríamos bombardeado", dijo el ministro de Ciencia y ex jefe de seguridad de Israel, Yaakov Perry, aunque un funcionario de Hamas aseguró que Deif no usa la vivienda.
Entre los escombros de la casa, los empleados del hospital sacaron los cuerpos de la esposa de Deif, su bebé de siete meses de edad y un hombre de 20 años.
Acusando a los islamistas de romper la calma con el lanzamiento de cohetes ocho horas antes del final de la tregua, Israel llamó a sus delegados en las negociaciones con los palestinos para que volvieran al país desde Egipto.
Los negociadores palestinos se retiraron de las conversaciones después culpando a Israel por su fracaso. "Israel frustró los contactos que podrían haber traído la paz", aseguró el jefe negociador palestino, Azzam al-Ahmed.
Mark Regev, vocero del primer ministro Benjamin Netanyahu, rechazó la acusación y dijo que los cohetes lanzados por Hamas hicieron "imposible" continuar las conversaciones.
Israel dio instrucciones a la población civil para abrir refugios antiaéreos en un radio de 80 kilómetros de Gaza y el ejército llamó 2.000 reservistas.
El Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, condenó la violación del alto el fuego y dijo estar "profundamente decepcionado por el retorno a las hostilidades".
Israel y Hamas mantuvieron conversaciones indirectas mediadas por Egipto para poner fin al conflicto de Gaza y sellar un acuerdo que ponga fin a los bombardeos de comenzaron el 8 de julio.
Los palestinos quieren que Israel levante el bloqueo económico sobre la Franja de Gaza, la creación de un puerto y aeropuerto, la apertura de pasos fronterizos seguros y la liberación presos que habían sido liberados por un acuerdo y luego volvieron a ser detenidos.
Un alto funcionario palestino en Gaza dijo que los puntos álgidos para alcanzar un acuerdo son las demandas palestinas para la construcción de un puerto marítimo y un aeropuerto, algo que Israel quiere aplazar.
Tel Aviv exige el desarme de los grupos militantes en el enclave, pero Hamas aseguró que esa no es una opción y aclaró que la lucha armada continuará hasta que Israel abandone los territorios palestinos ocupados.