Dos intendentes, los más votados en el oficialismo y la oposición

Righi (PJ-Lavalle) y Abed (UCR-Junín) se convirtieron en los candidatos más exitosos de la reciente elección. Ambos consideran que la clave está en el trabajo diario de la gestión y en la atención constante de las necesidades de los vecinos. Los dos busca

Dos intendentes, los más votados  en el oficialismo y la oposición
Dos intendentes, los más votados en el oficialismo y la oposición

Roberto Righi, 63,66% (PJ- Frente para la victoria)

"El límite lo marca la gente, que es la que te deja o te saca"

Ubicado a mitad del despacho, el escritorio de Roberto Righi (42) desaparece debajo de los expedientes y por eso, el intendente de Lavalle invita a una mesa aparte: “Lo mejor de este trabajo es gestionar recursos para las obras que precisa el departamento, pero es un asunto que viene con toda esta burocracia de los papeles”, justifica.

Righi es un hombre joven pero también, es uno cargado de experiencia: con sólo 29 años, fue el intendente más joven del país y ahora, con tres gestiones al frente de la comuna, tiene grandes chances de acceder a la cuarta, luego de sumar el 63,66% de los votos en las PASO, el intendente más votado de los que integran el Frente para la Victoria (FpV).

Dice estar agradecido por la confianza de sus vecinos y descree de la idea de poner límite a las reelecciones: “El límite lo marca la gente, que es la que te deja o te saca; es tan claro como eso y si no trabajás todos los días, no hay aparato que te sostenga cuando llegan las elecciones”; hace una pausa para descartar una llamada que entra al primero de sus dos celulares y completa: “Les ha pasado a muchos que quisieron seguir en la comuna pero la gente los mandó a su casa”.

Con esa misma lógica, cree que la provincia necesita habilitar la reelección del gobernador y que ésa es la mejor manera de consolidar políticas de Estado: “Hace falta más tiempo para el que hace las cosas bien. Mirá si no lo que pasa en San Juan y lo mucho que avanzó en estos años”.

- ¿Entonces usted no ve riesgos en perpetuarse en el cargo?

- El riesgo es el desgaste y que el funcionario se aburguese en el cargo, pero a mí no me ha pasado y todo el tiempo trabajo para conseguir fondos. Es sencillo el asunto: en Lavalle no tenemos ingresos genuinos, sólo la coparticipación y otros ‘dos mangos’ que llegan por tasas y servicios; si uno no sale a buscar plata, acá no se haría casi nada.

Habla de su departamento con pasión, tirando datos y cifras todo el tiempo: cuenta lo que ha hecho por sus vecinos, se apasiona con los proyectos que tiene en la cabeza y dice que “fomentar el arraigo” y que “el lavallino se sienta orgulloso de su tierra”, son sus objetivos principales.

- No debe ser sencillo en una comuna con tanto desierto.

- Ése es un error común. La gente cree que sólo somos un secano y pocos saben por ejemplo, que Lavalle es el segundo productor de uvas y olivos de la provincia.

Righi enumera obras de asfalto, de gas y cloacas; se entusiasma con los avances en educación aunque admite también las deudas, como las mejoras que necesita el hospital y cuenta que en épocas de crisis como ésta, “Lavalle apela a los ahorros que juntó para mantener el ritmo de trabajos. El error de muchos es haber hecho ‘la plancha’ cuando hubo abundancia; nosotros aprovechamos para armar una espalda financiera y ahora estamos usando ese dinero, llevando servicios y mejorando caminos. Creo que la gente lo reconoce”.

- Usted sacó el 63% de los votos de Lavalle, ¿tiene algún consejo para dar al resto del Frente para la Victoria?

- No hay recetas, salvo la de trabajar todo el tiempo y no sólo los seis meses previos a las elecciones, como creen algunos.

- ¿En quiénes ve eso?

- En todos lados hay políticos con 30 ó 40 años de trayectoria que dicen ahora vamos a largar esto y más cerca de las elecciones esto otro; es un gran error subestimar así a la gente; hay que trabajar todos los días y poner el acento en la gestión.

- Usted fue en sus boletas con Adolfo Bermejo y con Guillermo Carmona.

- Sí, con Adolfo somos muy amigos y Carmona nos pidió llevarlo.

- ¿Ve gobernador a Bermejo?

- Sí, claro; si la diferencia de Cambia Mendoza fueran 10 puntos te diría que en dos meses es difícil revertirla, pero son menos de 5 y vamos a hacerlo.

A Adolfo lo veo gobernador. Creo que va a hacer equipos fuertes, con ministros que tengan idea de lo que es la gestión territorial. Es un tipo humilde, que escucha, con mucha capacidad para el diálogo y el consenso. Humildemente yo tengo algunas ideas y él me ha invitado a compartirlas.

Perfil lavallino

Roberto Righi saltó del Concejo a la comuna en 2001, luego de la trágica desaparición del ex intendente Carlos Masoero (PJ). Más tarde se presentó a elecciones y desde entonces ha sido reelecto. Righi está en pareja con Ana Menconi, directora de Educación y Familia, de la comuna, con quien tuvo dos niños, Franco (11) y Antonella (10).

Mario Abed, 67,13% (UCR - Frente cambia mendoza)

"No me la creo porque pienso en el que no me está votando"

"No sé si hay un secreto; lo que sí puedo asegurar es que trabajo con entusiasmo y que trato de escuchar a la gente; el día que pierda algo de eso espero darme cuenta para irme a mi casa”, dice Mario Abed (51), intendente radical de Junín y el mandatario que más votos sacó en las PASO: se quedó con el 67% de los votos de su departamento; “en realidad fue el 67,13%” corrige Abed, con una lista de números que toma del escritorio y donde figura un dato curioso: en Junín, Alfredo Cornejo sacó más votos para la candidatura a gobernador que en Godoy Cruz: 64% contra 61%.

Las de Abed son cifras contundentes y además, son votos suyos: no tuvo rival en la interna de Cambia Mendoza ni ayuda de colectoras. Son votos propios y tal vez, como le gusta repetir desde el domingo, son “un piso para las elecciones de junio”.

Abed lleva 12 años de gobierno y en dos meses irá por otros 4 más. En todo ese tiempo, siempre consiguió mejorar su imagen y nunca sumó menos votos que en la elección anterior; cualquiera en su lugar podría marearse, pero Abed asegura que no.

- ¿Cómo hace con el 67% de votos para escuchar las críticas y no creerse siempre con la razón?

- Con humildad; en realidad lo que a mí me preocupa es el 33% que no me votó, porque significa que la municipalidad no supo llegar, no supo resolver algún reclamo. No me la creo porque pienso en el que no me está votando.

- Pero usted no tiene oposición ni siquiera en el Concejo, donde parece que logró convencer hasta a los opositores.

- (Sonríe) ¿No hay oposición siendo que hay dos concejales peronistas? -los otros ocho ediles son radicales-. Qué le puedo decir, dialogo con todos y corrijo lo que hay que corregir. Desde 2006, Junín tiene un plan estratégico que nos guía: somos un departamento agroexportador, pero también somos un departamento ordenado en lo financiero y confiable.

- Usted lleva 12 años y posiblemente se quede 4 más ¿No hay un riesgo allí de creerse indispensable?

- (Piensa un instante) No, no veo riesgos, veo trabajo. Fíjese que el lunes posterior a las PASO yo estaba a las 7 de la mañana en mi despacho, como todos los días desde hace doce años. Gané pero no me la creo y trato de rodearme de gente con expectativas; en el recambio de funcionarios está el alma de una gestión y yo he cambiado a muchos; trato de que me acompañen los mejores.

Dice que desde que es intendente nunca volvió a tomarse 15 días de vacaciones seguidos y cuenta que el apoyo de la familia es fundamental.

- ¿Qué le dice su esposa?

- Tengo su apoyo, por supuesto. En este cargo no podría ser de otra manera. Mi casa es mi refugio y ella es la que lleva todo ese mundo adelante.

También busco no perderme momentos de mi familia. Un ejemplo sencillo pero que vale: nunca falté a un acto escolar de mi hija.

Abed es hincha fanático de San Lorenzo y en Junín está aquella anécdota de hace un par de años, cuando consiguió que un camión del club de Boedo pasara por Junín y allí asoció a unas 170 personas, la mayoría municipales. Además, tiene una debilidad especial por su nieto Nicolás, de sólo cuatro meses, al que asoció al Ciclón al tercer día de vida.

- Hace tiempo se habló de una fórmula provincial acompañando a Julio Cobos, pero no se dio. Siendo el 'Gardel' de Junín, ¿por qué no ha podido saltar a la provincia?

- Estuvo cerca porque hubo un proyecto provincial junto a uno de los mejores políticos que es Julio Cobos. No se dio y no habrá sido el momento; igual, me veo más adelante en un proyecto provincial, para intentar ayudar desde otro ámbito. Tal vez en algún ministerio de (Alfredo) Cornejo, aunque si llegara esa propuesta, igual tendría que pensarla mucho.

- Y hablando de Cornejo, ¿cómo lo ve?

- Es la persona ideal para ordenar la provincia; es un apasionado de la política. Mendoza tiene muchos problemas y él es un gran gestor, tiene un departamento ordenado e impecable. Tenemos dos meses para convencer a aquellos que no nos votaron de que éste es el proyecto para los próximos 4 años. Cornejo será un gobernador que hará historia.

Perfil juninense

Luego de ser concejal, Mario Abed llegó a la intendencia en 2003 y se ha mantenido en el cargo. Está casado con Cristina con quien tuvo a Estefanía quien, junto a Juan Pablo, son papás de Nicolás, el primer y hasta ahora único nieto de Abed. Un dato: por lo general, la puerta al despacho de Abed permanece abierta todo el tiempo, más allá de con quién esté hablando.

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