Fue el sábado 12 de diciembre de 2015 cuando, cerca de las 8 de la mañana, un helicóptero Bell 206 (fabricado en Canadá), color celeste y blanco, identificado con las siglas LVVFO-206, sobrevolaba a muy baja altura el espejo de agua del dique Potrerillos y de pronto se clavó y una explosión rompió el silencio del lugar, tras lo cual la aeronave se hundió totalmente.
Carlos Zarlenga y Luis Barrera, piloto y camarógrafo, eran los ocupantes de la aeronave, asociada a la producción de MTV y la productora Bunim/Murray de 'The Challenge' (El Desafío), aunque un comunicado de la empresa norteamericana aseguró que "No había nadie del equipo a bordo".
Mientras que desde el gobierno provincial se aseguró que no había autorización para que la aeronave sobrevolara el dique a escasos metros del agua, por lo que, en ese momento, se anticipó "iniciar acciones legales contra la producción estadounidense MTV".
Por su parte Marcelo Ríos, jefe de Náutica de la provincia, confirmó que "hace una semana y media una chica llamó por teléfono para pedir autorización y yo personalmente le dije que no, porque era muy peligroso".
Aquel sábado 12
El siniestro movilizó, durante varias semanas a más de 20 personas, integrantes de Bomberos de la Policía de Mendoza, Voluntarios de Luján,
Armada Argentina y de la Dirección Provincial de Náutica que tras múltiples tareas lograron. nueve días después, recuperar la cabina y una parte del fuselaje del helicóptero, que se encontraban a más de 60 metros de profundidad, oportunidad en que se descubrió que los cuerpos de ambos ocupantes, que deberían haber estado retenidos por los cinturones de seguridad, no estaban dentro de la nave.
La búsqueda continuó durante 30 días, tras lo cual y según lo establece el código para estos siniestros se decidió suspender el operativo de rescate.
La investigación
Durante la investigación se conoció que el helicóptero Bell 206 B, había despegado desde el aeródromo La Puntilla y ya sobre el espejo de agua, volaba a baja altura (a unos 15 metros, según versiones), hasta que comenzó a descender lentamente, cuando el rotor principal tomó contacto con el agua y la aeronave se sumergió. Fue a menos de 300 metros del lugar prefijado para aterrizar, sobre una playa al sur del paredón del dique.
Con las partes recuperadas y analizadas de la aeronave se supo que no se encontraron fallas mecánicas que impidieran su normal funcionamiento, por lo que la Junta de Investigaciones de de Accidentes de Aviación Civil (Jiaac), en su informe final si bien señaló que "los motivos del hundimiento no pudieron ser establecidos con certeza" concluyó que la caída del helicóptero se "habría producido por un error del piloto", como la causa más probable.
Hoy los cuerpos de Carlos Zarlenga y Luis Barrera siguen sumergidos en las profundas aguas del dique Potrerillos. .