Las estadísticas revelan que en la provincia las consultas por
desórdenes alimenticios
siguen creciendo en número. Un relevamiento reciente indicó que son más de 700 las consultas que se realizan al año por bulimia y anorexia.
En Mendoza existen dos centros principales de atención para personas que padecen trastornos alimenticios: el
Hospital Infantil Humberto Notti
y la
Asociación de Lucha contra Desórdenes Alimentarios (ALDA)
. El objetivo de estos espacios es brindar una respuesta multidisciplinaria a la problemática, ofreciendo el trabajo conjunto de especialistas en medicina clínica, psicología, psiquiatría y nutrición, entre otros profesionales.
¿Bulimia o anorexia?
Si bien en ambos casos se trata de desórdenes alimenticios, la bulimia y la anorexia tienen marcadas diferencias entre sí. Conocer las señales de cada cuadro es imprescindible para poder realizar observaciones e identificar signos de alerta.
Anorexia:
la anorexia está asociada a un rechazo a mantener un peso normal y a una pérdida excesiva de peso sin causa orgánica. Una persona con anorexia nerviosa no pierde el apetito, sólo aprende a controlarlo.
Bulimia:
la bulimia nerviosa está vinculada a "atracones" de comida, que luego son seguidos por conductas compensatorias, como la inducción al vómito, la ingesta de laxantes, el exceso de actividad física y las dietas restrictivas.
¿Qué señales hay que buscar?