La Justicia otorgó hoy la prisión domiciliaria a Julieta Silva (29), quien atropelló con su auto y mató al rugbier sanrafaelino Genaro Fortunato (25), el 9 de septiembre a la salida del bar "La Mona".
Luego de esta decisión, se vieron dos escenarios obvios y bien marcados en los tribunales de San Rafael: por un lado, el abogado defensor Alejandro Cazabán se mostró conforme con el beneficio otorgado para Silva y por el otro, la tristeza de la familia Fortunato.
La audiencia comenzó a las 9 y fue pedida por el abogado de la mujer de 29 años, quien apeló la prisión preventiva que mantuvo hasta esta mañana a la acusada presa en el penal de San Rafael.
La prisión de Silva fue decidida por la fiscal Andrea Rossi, quien luego de las primeras investigaciones y de declaraciones de algunos testigos, la imputó por homicidio doblemente agravado por el vínculo y alevosía.
Ahora la investigación oscilará entre el homicidio simple con dolo eventual o el homicidio culposo agravado, ya que el juez consideró que "no hay dolo directo", es decir, que no fue intencional.