La devaluación del peso argentino entre el miércoles y el viernes pasado se está por llevar la mitad de lo que la Provincia había conseguido evitar en gastos con el Plan de Desendeudamiento con la Nación para los meses de febrero y marzo.
Es que los vencimientos de deudas en los próximos dos meses crecieron 29 millones de pesos por la disparada del dólar, mientras que los compromisos de pago postergados en acuerdo con la Nación sumaron 56 millones de pesos.
Producto de la devaluación de los últimos tres días hábiles, el ministro de Hacienda, Marcelo Costa, encontrará mañana -cuando se reintegre a sus funciones luego de sus vacaciones- un calendario de pagos con cifras bastante más abultadas que las que tenía previsto afrontar cuando elaboró el proyecto de presupuesto que aún espera aprobación en la Legislatura.
La deuda total de Mendoza de unos 7.600 millones de pesos -repartida casi por mitades entre las monedas argentina y estadounidense- creció entre miércoles y jueves 650 millones de pesos, a pagar en los próximos cinco años.
Baste decir que en febrero -dentro de seis días- la Provincia comenzará a enfrentar vencimientos de pagos al BID y al BIRF por quince créditos de las épocas de Julio Cobos y Celso Jaque que hoy suman pagos por 26 millones de pesos, muy lejos de los 19 millones que sus técnicos le habían estimado hace seis meses (con un dólar a 5,75) para cancelar en febrero de este año.
También aparecen compromisos de pago por 20 millones por la deuda con el Credit Suisse que tomó Jaque y por la compra de helicópteros a Helibrás de Cobos. En este caso la estimación hablaba de 14 millones, seis millones menos.
En febrero, Costa comenzará a pagar el primero de los tres bonos emitidos por Francisco Pérez (Link 16) por el que tendrá que abonar 6 millones de pesos de interés, en lugar de los 4,6 millones previstos hasta el miércoles pasado.
El panorama se complicará aún más en marzo cuando la Provincia deba enfrentar una nueva cuota del Bono Mendoza 18 con el que Julio Cobos refinanció la deuda que -a su vez- heredó de Arturo Lafalla con el Bono Aconcagua.
Es que el envío a Nueva York de los 12,5 millones de dólares para que el Bank of New York Mellon le cancele a los tenedores una nueva cuota de amortización le costará a la Provincia cien millones de pesos y ya no los 86 millones de hace tan sólo cinco días. El miércoles, el dólar oficial cotizaba a 6,92 y no a los 8 pesos con los que cerró el jueves y repitió el viernes.
También en marzo, Costa deberá pagar 3 millones de pesos para los tenedores remanentes del Bono Aconcagua, que no aceptaron el canje por el Mendoza 18.
En cuanto a las obligaciones en pesos (que no varían nominalmente por la devaluación), en febrero también tendrá que pagar 4 millones de pesos por la deuda en pesos con los Fondos Fiduciarios nacionales de obra por las eternas dobles vías, por caminos provinciales, por la ampliación escolar y por la Ruta Nacional 40. Igualmente tendrá que cancelar los pagos de febrero a la banca comercial (Nación, Credicoop, Patagonia y Macro) por deudas tomadas por las administraciones de Celso Jaque y el propio Francisco Pérez.
Una a favor, por el Desendeudamiento Costa logrará evitar -al menos hasta abril- el pago previsto de 28 millones de pesos para febrero y de 28 para marzo.
En sus dos primeros años de gestión, el gobierno de Francisco Pérez tomó crédito por cifras inferiores a las autorizadas por la Legislatura, en momentos de restricción crediticia o de altos costos de acceso al financiamiento. En 2012 tomó préstamos bancarios (por 721 millones de pesos) y en 2013 apeló a la emisión de tres bonos y una letra todos bajo la modalidad del 'dólar linked', que consiste en un pago en pesos pero al valor del dólar al momento del vencimiento. Esta modalidad hizo crecer la deuda un 16% entre el miércoles y el viernes de la semana que termina.
El gobierno de Pérez comenzará a cancelar este año sus tres bonos (en marzo, setiembre y octubre) y ya canceló su letra a 97 días (según la UCR a un costo de 32 millones de pesos extra). Los tres títulos públicos provinciales serán cancelados durante los mandatos del próximo gobernador (Link 16 y Link 18) y habrá que esperar dos gobernadores para que se salde el tercero (Link 20).
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