Docentes privados de algunas instituciones de la provincia que reciben aporte del Estado aún no cobran sus haberes, por lo que decidieron, junto con el sindicato que los nuclea (Sadop), hacer uso del débito laboral, una medida que implica la no asistencia a clases hasta que se les pague lo adeudado por los meses trabajados.
El plan de lucha se extenderá al menos a lo largo de esta semana y la adhesión de los docentes dependerá de la situación que presenta cada institución, que debe ser la encargada de avisar a los padres cuando los alumnos no tengan clases.
Concretamente, los docentes que aún no han recibido su sueldo de agosto son aquellos que trabajan en colegios de gestión privada que cobran cuota y reciben subsidio del Gobierno. Desde Sadop justamente señalaron que el aporte estatal aún no llega y encima muchos de esos establecimientos no tienen armado “un colchón con las cuotas de los alumnos” para afrontar el pago a los docentes, ya que la situación ya pasa a ser responsabilidad de los dueños de las instituciones.
Este grupo recibirá el pago recién el sábado o el lunes de la semana que viene, por lo que los profesionales seguirán con su plan de lucha hasta que se solucione su problema. En teoría el pago debe hacerse a los profesionales dentro de los primeros cuatro días hábiles de cada mes.
“Los colegios que sí recibieron el aporte estatal son los que no cobran cuota. Naturalmente se los ha priorizado y los docentes han recibido su pago junto con el de los docentes del sector estatal, como se hace habitualmente”, aclaró Jorge Fiore, del área gremial de Sadop Mendoza.
La retención del débito laboral está prevista en el Código Civil. Prevé la retención de tareas hasta que no se cobre el sueldo por el mes trabajado.
Andrés Cazabán, jefe de Gabinete de la Dirección General de Escuelas (DGE) reconoció que hubo demoras por “problemas financieros”. El funcionario recordó que “la relación laboral es entre la institución y el docente”.
