El mayor temor de los docentes del Instituto Próvolo de Luján de Cuyo se hizo realidad. Esta tarde la Dirección General de Escuelas (DGE) anunció que el colegio para chicos sordos no iniciará el ciclo lectivo hasta que no haya una sentencia judicial por los casos de abusos sexuales allí perpetrados.
La DGE informó esta tarde el cierre preventivo del colegio hasta que la Justicia se expida sobre los abusos. Así las cosas, las clases no iniciarán en marzo en el colegio especial y los alumnos serán reubicados en otras escuelas.
Los aberrantes casos de abusos sexuales que salieron a la luz en noviembre del año pasado y que apuntaban directamente a sacerdotes y empleados del Instituto Próvolo de Luján de Cuyo generaron conmoción no sólo en la sociedad mendocina sino en sus autoridades.
Según informaron esta tarde Francisco Fernández, director de Asuntos Jurídicos, y Beatriz Della Savia, directora de Educación Privada de la DGE, la institución dejará de recibir los subsidios que le aportaba el Estado provincial.
Según la Resolución 93/2017, el instituto no podrá prestar servicios educativos en ninguna modalidad hasta que se dicte sentencia en las causas penales, iniciadas tras los abusos sexuales perpetrados por curas y por parte del personal contra los niños y adolescentes que estudiaban en ese lugar.
También se abrirá un sumario administrativo tras detectar irregularidades técnicas y pedagógicas en el Instituto, se informó.
Según informó radio Mitre Mendoza, un 40% de los padres de los alumnos habían decidido cambiarlos después de lo ocurrido. Al problema de que el Próvolo funcionaba como internado para chicos que viven en otros puntos de la provincia se suma la incertidumbre por los puestos de trabajo de los docentes.
"Estamos viviendo una crisis muy grande porque a través de los medios nos enteramos que la institución cerraba. No hemos tenido ninguna notificación. Fue una pésima noticia de fin de semana y un balde de agua fría para nosotros", relató a radio Nihuil Leticia Grellet, docente del instituto.
Y agregó, preocupada: “Hemos trabajado durante enero y febrero para tener la escuela en condiciones, para iniciar el ciclo lectivo y el viernes nos encontramos con esta noticia al mediodía”, destacó.
La profesora explicó que la comunidad educativa se sintió señalada y juzgada tras conocerse los casos de abusos pero despegó a los docentes. “Nos hemos sentido muy juzgados y señalados sin tener la posibilidad de expresar cuál ha sido nuestra posibilidad en la escuela. Nosotros hemos puesto nuestro corazón y nuestra alma en el colegio y obviamente que no teníamos idea de los hechos que supuestamente hubieran pasado en la escuela”, se descargó Grellet.
“Lo que queremos expresar es que los dichos del director General de Escuelas no son correctos, no hay otra escuela a la que estos chicos puedan asistir y tengan los servicios que nosotros tenemos. Además, el instituto está formado por la escuela primaria y la escuela de formación integral, esta es única en la provincia para chicos con discapacidad auditiva. Entonces no es que se los redistribuye y punto”, criticó Grellet.