Le costó, pero -tras vencer en la catedral de Francia- lo puede decir: Novak Djokovic, el líder del circuito ATP está pulverizando todos los récords y está camino a convertirse en el “uno” de los elegidos. Ayer, después de tres horas y fracción de un emotivo partido, París quedó rendido a sus pies.
Con el título en Roland Garros, tras imponerse el escocés Andy Murray (3-6, 6-1, 6-2 y 6-4), Nole dio por fin el beso que le faltaba: la Copa de los Mosqueteros. Minutos antes, usó su raqueta a para dibujar un corazón en la cancha de arcilla que le había dado tantos dolores de cabeza en otros años y se recostó de espalda mirando el cielo nublado de París
“Es en verdad un momento muy especial”, dijo; “quizá el mayor de mi carrera”. Djokovic ganó, después de varias frustraciones su primer título en Roland Garros, que se le había negado en tres finales previas (dos ante el español Rafael Nadal y la última frente el suizo Stan Wawrinka).
En la laureadea arena del Philippe Chatrier, el serbio se quitó de encima todos los fantasmas que le amenazaban en París y atacó el título con el hambre de un lobo desnutrido.
La presa, esta vez, Murray, con su lucido tenis poco pudo hacer (más allá de un gran primer juego) para frenar el tiránico temperamento de Nole. Quien pletórico, elevó al cielo francés su 12º cetro del Grand Slam y el 65º título en su carrera profesional, cuando todavía el horizonte del retiro parece muy lejano.
Djokovic, el octavo tenista que gana los cuatro 'majors' y comparte el mismo mérito conquistado por Fred Perry, Don Budge, Rod Laver, Roy Emerson, Andre Agassi, Rafa Nadal y Roger Federer (en orden cronológico), no logró ocultar su emoción. “Todo es posible en la vida”, incluso ganar los cuatro Grand Slam en un año, señaló Nole.
“Todo era diferente este año, cada vez yo esperaba que fuera la buena. He tenido mucho apoyo, comunión con el público que me ha ayudado a ganar al final Roland Garros”. Luego, Djokovic, se refirió haber alcanzado ganar los cuatro grandes, como Nadal y Federer. “Tienen opciones para ganar más. Son grandes y les tengo mucho respeto”.