En Buenos Aires hay una comunidad judía ortodoxa y muy observante de las reglas religiosas. Un gran número de integrantes y una historia de muchos años, la vuelven una de las más importantes de la región.
Todo este bagaje, que es religioso pero que también es cultural, ha sido sistematizado en torno a un producto tendiente a brindar mejores servicios a los turistas. Muy pensado, pero recientemente estrenado, Buenos Aires Kosher representa la respuesta de este destino turístico para los que practican el judaísmo y no quieren dejar de hacerlo durante su estadía en la capital de la Argentina.
Que los visitantes que consumen kosher se deleiten con los manjares sin dejar de lado sus principios religiosos es el objetivo de la iniciativa. De esta manera, en varios barrios porteños pueden localizarse restaurantes y rotiserías que preparan las comidas de acuerdo con las normas y con una intervención rabínica.
Entonces, sushi, hamburguesas de cadenas multinacionales y hasta incluso asado kosher, todo está disponible en Buenos Aires. En un folleto editado por el ente turístico local figuran las direcciones y contactos de todos los prestadores.
Vale agregar que los hoteles no se han quedado al margen y que hasta el momento hay 12 alojamientos de 4 y 5 estrellas que integran el Club Kosher y que están capacitados para atender las necesidades alimenticias, de descanso sabático y las festividades de sus huéspedes practicantes del judaísmo.
Andar la ciudad
La historia y la vida cotidiana de la comunidad judía son muy notorias en algunos barrios. Concretamente en dos de ellos hay circuitos, enmarcados en el turismo religioso, que resultan muy interesantes, tanto para los turistas practicantes como para los que deseen una experiencia cultural. Folleto en mano, pueden encararse de manera auto guiada.
Villa Crespo, espera entonces, con 4 paradas. El Templo Beit Jabad (Serrano 69) es una de ellas y un buen sitio para recordar que en la década del 40 los judíos que llegaban de Polonia lo inauguraron. En tanto en Serrano y Lavalle hay que detenerse para conocer la Fundación Tzedek, donde se realizan programas sociales a partir de donativos. Las librerías judías son emblemáticas y la más destacada de este barrio es Sigal.
Desde 1930 se especializa en libros en castellano sobre Torá, Talmud, tradiciones, estudio del idioma hebreo e historia judía. Un dato interesante es que, hace 10 años, fue declarada librería de valor patrimonial. La última parada es en el Templo de la calle Camargo, perteneciente a la Comunidad Israelita Sefardí, añoso y de grandes dimensiones.
Por su parte, el recorrido por Balvanera es para llegar hasta el gran Templo Paso, que fuera fundado por inmigrantes rusos y polacos para el estudio inicial de los textos sagrados.
Acaso la visita que más convoque sea a la Amia. Quizá por lo que nos duele a los argentinos. Esta entidad nació para generar acciones necesarias para dar cumplimiento a la tradición judía y actualmente es un espacio de articulación y participación para todos los judíos del país.
Mariel Tenembaum, encargada de turismo de la entidad, comentó que para ingresar al edificio y realizar el tour es necesario concurrir en compañía de un guía o agencia autorizada (que se pueden consultar en la web), por cuestiones de seguridad y organización. Las visitas son de lunes a viernes a las 10 y tienen un costo de U$S 15 por persona.
El monumento a las víctimas de la Amia, ubicado tras el muro de acceso en un espacio denominado Plaza Seca, en la sede destruida por la explosión del 94 y la plantación de árboles en memoria de los que murieron en ese atentado (en Pastuer, entre Corrientes y Córdoba), son más paradas.
Finalmente, el circuito está integrado por el Centro Sucath David, en el barrio de Once, donde se dictan cursos y se hacen actividades relacionadas con la vida comunitaria y por la Congregación Sefardí Yesod Hadat, institución creada por inmigrantes de la ciudad Siria de Alepo, donde funciona una escuela y un centro de formación de rabinos.
Más para conocer
Rituales. Además de los de Balvanera y Villa Crespo, en otros puntos urbanos, hay templos y sinagogas que pueden visitarse en el curso de un viaje por Buenos Aires. Por ejemplo, en Belgrano está Ajdut Israel (
http://www.ajdut.com.ar/index.php/es/
); en Colegiales el Templo de la Comunidad Chalom (
) y en Recoleta Jabad Lubavitch (
), por nombrar unos.
El placer de leer. En Belgrano, Flores y Recoleta, además de Balvanera, hay librerías en las que se comercializan objetos religiosos, libros de cultura y tradición milenaria del judaísmo.