Al despertar,
Bella
tenía una nueva arruga en su rostro,
Alicia
necesitaba viajar otra vez al país de las maravillas y a
Cenicienta
la habían agredido en un callejón.
Sí, estos no son los finales que se esperan para los personajes de Disney quienes viven felices y "comen perdices". Por el dibujante californiano
Jeff Hong
desacreditó la prosperidad de estos dibujos animados situándolos en otro contexto más real y posible.
Así, en
("Infelices para siempre"), el último trabajo del estadounidense, se ve a una
Ariel
("La sirenita") que sufre porque su hábitat (el mar) está lleno de alquitrán, a una Alicia bajo los efectos de la droga y a una Cenicienta en un temeroso callejón con su vestido roto, posible víctima de una agresión sexual.
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O también muestra a un
Simba
("El Rey León") en un zoo, a
Bambi
como una cabeza de ciervo disecada que decora una lujosa casa, a
Remy
("Ratatouille") en un laboratorio de experimentación con animales y a
Dumbo
explotado en un circo.
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El dibujante, que trabaja en la factoría Disney desde sus 17 años, ha colaborado en las películas de "Hércules", "Tarzán" y "Mulán" y aseguró que este proyecto surgió de la necesidad de darle salida a su energía creativa a través de dos cosas que le apasionan: la animación y el humor en la red.
"Creaba imágenes graciosas y virales principalmente para hacer reír a mis amigos. Pero realmente me encanta unir dos cosas que normalmente no van asociadas y que, al hacerlo, crean un nuevo mensaje", explicó Hong.
En cuanto a su actual creación, explicó: "La idea original era poner a las princesas de Disney en situaciones peligrosas, pero me di cuenta de que el resultado podía ser más potente si sometía a esos personajes a problemas del mundo real".
Su objetivo con "Infelices para siempre" es denunciar que «es la humanidad en general la que está perjudicando a estos personajes. Lo que quiero mostrar es que nosotros somos los culpables, especialmente en temas como la deforestación o el abuso de animales, y que es algo que podemos cambiar».
Este artista eligió los clásicos de Disney porque, según él, todos los conocemos y los amamos: "Además, un dibujo es un lenguaje universal que todos entendemos", dijo Hong.
Dina Godstein y "Fallen Princesses"
El trabajo de Jeff Hong recuerda, en parte, al de la israelí
Dina Goldstein
, titulado 'Fallen Princesses' ('Princesas caídas'). La fotógrafa que decidió hacer esta serie de imágenes después de que le diagnosticaran cáncer de mama a su madre, explicó: "En aquella época, mi hija Jordan estaba en la 'fase princesa'. Había princesas por todas partes. Lo de mi madre y esta etapa de mi hija colisionaron en mi mente y me pregunté cómo sería una princesa si tuviese que luchar contra una enfermedad, si tuviese dificultades económicas o si estuviese envejeciendo".
La autora critica la vida perfecta a la que, audiovisualmente, nos someten: "No tengo nada en contra de los finales felices, de hecho, creo que la infancia debe ser un momento libre de preocupaciones adultas. Pero los mensajes de Disney en concreto son engañosos y sexistas".
Así, con una mezcla de humor y dramatismo, esta fotógrafa muestra a una
Blancanieves
paridora con un príncipe de 'fútbol y sofá', a una
Rapunzel
sometida a quimioterapia perdiendo su adorado cabello o a una Bella a la que aquello de "la belleza está en el interior" no acaba de convencerle.
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Se describe —por este orden— como esposa, madre y artista, y reconoce que, por suerte, ella no se considera una "princesa caída".