En Trelew se encuentra el MEFMuseo Paleontológico “Egidio Feruglio”, un genial espacio con los fósiles originales del dinosaurio más grande del mundo, hallado el año pasado en un campo cercano a la ciudad. Los restos de este ejemplar y de otros de los gigantes patagónicos son exhibidos en esas instalaciones dejando boquiabiertos a los visitantes.
En las salas se aprende sobre las tareas de reconstrucción de este gigantesco herbívoro que en vida alcanzó los 42 metros de longitud, que se encuentran realizando científicos y especialistas.
En el sitio hay un área de Laboratorio de Preparación de fósiles y la Colección del Museo, donde se catalogan y preservan los fósiles hallados en el campo para poder ser estudiados en el futuro.
Un dato interesante es que mediante tecnología de impresión 3D, se están fabricando réplicas de cada hueso del dinosaurio más grande del mundo, destinadas a obtener una reconstrucción completa, y científicamente precisa, del animal en su tamaño original. Horarios: de lunes a viernes: 10 a 18. Sábados, Domingos y Feriados: 10 a 19. Entradas: mayores $ 80, menores $ 55.
DOS IMPERDIBLES
Geoparque Bryn Gwyn es una reserva natural donde se visualiza la exploración científica en una verdadera experiencia de campo. Una aventura en un recorrido por el pasado natural de este rincón de la Patagonia abarcando los últimos 40 millones de años.
Allí podrá observar fósiles, parcialmente expuestos, de ejemplares hallados por los investigadores a lo largo de los años. Estos especímenes relatan una historia de cambios geológicos y climáticos que afectaron la región desde mediados del Paleógeno (período Terciario) a la actualidad.
El ascenso de la barda es sencillo para la mayoría de los visitantes y la Estación de Campo cuenta con servicios sanitarios y otros recursos para disfrutar de la visita. ¡No hay excusas! Entradas: mayores $ 30, menores $ 15.
Exploradores en pijamas. Una aventura que invita a dormir con los dinosaurios, conocer la vida prehistórica de la Patagonia, explorar el Museo a la luz de las linternas y fabricar réplicas fósiles entre otras divertidas actividades para chicos de entre 6 y 12 años.
La idea es primero conocerse, luego, adentrarse en los parajes patagónicos a través de recursos gráficos y multimedia, para ver como eran en los días en que los dinos habitaban estas tierras. Lo bueno comienza cuando se recorre la exhibición con linternas y se llega al área de investigación para conocer los gabinetes donde los científicos realizan sus estudios y descubrimientos.
La cena se pasa entre anécdotas y nuevas hipótesis de los pequeños, para más tarde hacer desafíos y juegos grupales en la Biblioteca. Ya en horas de la madrugada, se visita el laboratorio de preparación para fabricar réplicas de fósiles, que los peques podrán llevar a casa como recuerdo de la aventura. Al terminar todas las tareas, cada explorador buscará un lugar para dormir... ¡en la Sala de los Dinosaurios!