Diez melodías sedientas de insomnio y olvido

Trece años después de su fundación, Altertango con su "Fargüest" inicia una nueva etapa con un álbum personalísimo, integrado en un ciento por ciento por canciones propias - con excepción de tres en coautoría entre Elbi Olalla y Ale Guyot, de 34 Puñaladas -, que nos recuerda a los primeros años en que Victoria Di Raimondo se animaba a cantar sus estrofas escritas en letra cursiva para animar las noches de la cantina "Los dos amigos", donde casi todo comenzó.

Después vino la música de Elbi, el formato orquesta de cámara y la apropiación del axioma "todo tiempo pasado fue mejor" típico del 2x4 rioplantese.

En su trayectoria, fusionaron géneros, amilongaron el rock, desmembraron candombes, milongas y covers y recuperaron letras olvidadas y de paso actualizaron a través del carisma de Victoria, el arquetipo de la heroína romántica del relato arrabalero, mezcla de Ada Falcón y Edith Piaf, en una sola figura metafórica.

Las diez nuevas canciones de "Fargüest" es Altertango puro, al mismo tiempo restrospectivo y en proyección y a su vez, una prueba del gran momento compositivo del ensamble. El resultado es una obra sincrética de historias y sonidos, con instantes autobiográficos y ficciones de seres suburbanos y marginales desmembrados emocionalmente en el que se ecualiza con más precisión lo manufacturado en discos como "Melodramas" y "Tormenta".

"El título del disco, 'Fargüest' llegó como un juego", nos aclaró Elbi Olalla. "Firmábamos el asunto de los correos electrónicos con nuestros amigos de Buenos Aires con la frase 'desde el Lejano Oeste' . Una vez, nos quedamos varados por el alud que cayó en Alta Montaña y ese paisaje desolador nos recordó la palabra fargüest que parece rescatada de algún lunfardo del pasado".


Si bien el proceso de grabación batió récords de velocidad, el tránsito para llegar a la lista definitiva de canciones fue todo lo opuesto. "Cuando uno ha decidido elegir canciones propias para un álbum completo, aparecen las inseguridades, esa cosa de acá estoy, eso es lo que soy, es lo que tengo y darle para adelante", se sinceró Victoria. "Si bien subirse a un escenario es una actividad ya de por sí de alta exposición, el hecho de mostrar además tus propias canciones, no ha sido una tarea fácil para mí, de hecho, yo quería sacar los temas, no sumarlos".

En una situación esquiva al principio, la cantante tuvo que lidiar con los años que la separaban de aquellos comienzos y esa especie de "inconsciencia juvenil" y contraponerla con la mirada autocrítica del presente. "Ponía excusas y no me hacía cargo. Este disco en todo caso, parece abrir otro camino. Luego de aprenderme docenas de tangos de otros, quizá ha llegado el tiempo de cantar mis propias canciones".

Como ejemplos más que personales, han quedado, entre otras, "La viajera", dedicada a la poeta y escritora Alejandra Pizarnik, referente literario de Victoria y la bella "La última esquina", canción que ella misma se negó hasta el último momento incluir en el CD, grabada finalmente por imposición del grupo. "Estas canciones no intentan algo que no son, hay sinceridad ahí, intentan esquivar metáforas rebuscadas".

Según sus propias palabras, "Fargüest" refleja lo más fidedigno del estado actual que Di Raimondo, Olalla, Ezequiel Acosta, Pablo Conalbi y Gerardo Lucero expresan juntos en Altertango. "En el álbum están las cosas que sentimos, las cosas que nos han pasado, está enmarcada nuestra identidad, una identidad con ese mix de referencias imbricadas. Está nuestro flujo de laburo, tan tranquilo como desmesuradamente ensayado. Sentimos que estamos caminando al borde de una cornisa y ese vértigo de las alturas nos ayuda en el proceso de la creación", definió Elbi.

La presentación del Altertango (hoy a las 21.30 en el escenario de la explanada del complejo) será la clausura del calendario del Festival Tango Por Los Caminos del Vino y el Primer Festival de Poesía de Mendoza, en el marco de las actividades de la Feria del Libro 2013 que se está desarrollando en el Centro Cultural Le Parc. Entrada libre y gratuita.