Separarse no tiene nada de malo... si de ambientes se trata, ¡obvio! A veces, tenemos espacios en casa que son bastante amplios y que, separándolos, podríamos lograr mini lugares igual de cómodos y más funcionales.
Te proponemos diferenciar dos ambientes dentro de un espacio común para que cada uno disfrute de su propia autonomía.
UNA PUERTA CORREDERA QUE FLEXIBILIZA EL ESPACIO
Porque separa la cocina del salón y, a la vez, integra ambos espacios con solo dejarla abierta. Aquí, se ha optado por una decorativa puerta de estilo granero que da un cuidado toque campestre y decora por sí sola.
UN GRAN CERRAMIENTO CON GUILLOTINAS
Da independencia a la cocina, pero a la vez permite comunicarla con el salón y ganar una zona de barra con solo abrir las guillotinas. Es un diseño de los arquitectos Ana Blanco y Fran Mengíbar.
UN MURETE QUE PRESERVA LA INTIMIDAD
Además de dar autonomía al comedor sin que este renuncie a la luz que procede del salón. Además, favorece una relación fluida entre ambos ambientes, cosa que con una pared no ocurriría. Aquí, por ejemplo, preserva la zona del comedor, que queda separada del resto del salón.
UN ARMARIO SEPARADOR
Es una solución muy práctica para dotar de intimidad a la zona del vestidor cuando este está integrado en el dormitorio. Aquí, por ejemplo, la trasera del armario hace una doble función: por un lado, de apoyo del cabecero y, por otro, de separación entre la zona de cama y la de vestidor. El armario es un diseño de la decoradora Pía Capdevila.
UN VERSÁTIL MUEBLE BAJO
En salones que integran el comedor, tirar de un mueble bajo o de la trasera del sofá para separar la zona de estar de la de comer es un recurso doblemente efectivo, porque separás ambos ambientes y, a la vez, ganás una zona de almacenaje. Aquí, se ha optado por una librería baja apoyada en la trasera del sofá. Al elegirse a juego con el sofá se integra a la perfección en la decoración.
UNA LIBRERÍA DE DOBLE FUNCIÓN
Ofrece espacio de almacén y separa el salón del dormitorio. Pero además, esta librería tiene truco, porque por el lado del estar se ha planificado abierta a modo de librería mientras que por el lado del dormitorio tiene puertas e integra un completo vestidor. Además, al no llegar hasta el techo deja pasar la luz natural entre ambos espacios. Es un diseño a medida de MJ Figueroa.
CABECERO PARECE...
Pero armario es. En este dormitorio se optó por dividir la zona de vestidor de la de cama mediante un armario bajo –de Ikea– a modo de separador y que hace además de cabecero.
UNA BARRA MULTIUSO
En cocinas abiertas al salón o al comedor, habilitar una barra es una manera de separar ambos ambientes y, a la vez, ganar una práctica zona de desayunos o comidas rápidas.
UNA PARED DE CRISTAL
Es un recurso que separa pero a la vez comunica. Aquí, la decoradora Jeanette Trensig dotó a la cocina de independencia pero integrándola en la zona de día gracias a un cerramiento acristalado. Además, con este recurso multiplica la claridad de la cocina.
UNA VENTANA MUY PRÁCTICA
Lleva luz natural a la cocina y, a la vez, da mucho juego, porque permite comunicar y dividir la cocina del comedor en función de las necesidades.
Por ejemplo, cuando se está cocinando, la ventana evita que humos y olores invadan el comedor. Es un diseño de la decoradora Neus Casanova.