El domingo 3 de setiembre de 2017 será un día que Rincón del Atuel jamás olvidará. Es que con mucho sudor, esfuerzo, dedicación y disciplina, uno de los equipos denominados 'chicos' de San Rafael pudo coronar una gran campaña y celebrar su primer título en algo más de seis décadas de historia. Este club, plagado de gente trabajadora, inscribió su nombre en el historial de campeones de la Liga Sanrafaelina tras la victoria en Monte Comán, y aunque estará "parado" deportivamente un tiempo, ya tiene en mente sus próximos objetivos.
Aún con el ánimo por las nubes luego de haber llevado al club a la vuelta olímpica en Primera, Diego Paolantonio, su entrenador, nos atendió el teléfono y dio detalles de lo que fue la consagración. "Es algo muy importante, porque es uno de los equipos más chicos de nuestra ciudad, una institución en donde todo se hace todo a pulmón, entonces ver que el trabajo dio sus frutos me pone inmensamente feliz", fueron sus primeras palabras.
-Tengo entendido que la dirigencia respetó un proceso largo de tu cuerpo técnico ¿fue una de las claves del éxito?
-Puede ser. Siempre es bueno que los técnicos y sus colaboradores puedan desarrollar un proyecto deportivo hasta el último punto. A veces se puede dar y otras no tanto, pero como nosotros no teníamos la obligación de lograr cosas importantes en el corto plazo, trabajamos tranquilos. Venimos de un proceso de tres años y fuimos dando pasos cortos. Zafamos del descenso en el primer año y después aseguramos la Permanencia en el segundo, mientras que en 2016 llegamos a la final con Pilares y si bien la perdimos, nos dimos cuenta de que podíamos dar algo más.
El año pasado, Rincón del Atuel se quedó con el Torneo de los 4, cuyo ganador clasificaba al Federal C 2017. Pero el premio máximo llegó en este semestre.
-Todavía queda una fecha del campeonato y después de eso no va a tener competencia oficial por un tiempo ¿hasta qué punto eso es beneficioso, tanto en lo deportivo como en lo económico?
-Por haber sido campeones en este torneo, ahora nos tocará descansar. Aunque no vamos a tener partidos por los puntos, intentaremos juntarnos de vez en cuando para que sigamos inculcando conceptos. Ya tenemos la clasificación al Federal C (2018) y arrancaremos a trabajar a mediados de diciembre. Falta tiempo y no está confirmado cuando arrancará esa competencia. Por eso, casi seguro, que varios jugadores pasarán como refuerzos a otros equipos del departamento que jugarán el Torneo de los 7, clasificatorio también al ex Torneo del Interior. En lo económico, buscaremos crecer para afrontar futuros gastos porque no vamos a poder contar con recaudaciones.
-¿Cuál es la sensación de tu primer título como DT?
-Es algo único. Cuesta caer, en ese momento uno no se da cuenta. Pero con el correr de las horas la gente te empieza a felicitar, hay amigos que te llaman, los medios se acercan, y es y ahí cuando te cae la ficha. Haber logrado mi primer título como DT con Rincón es grandioso porque es una institución humilde, que puso mucho esfuerzo y que por fin logra un título.
-Uno mira la tabla y ve que fueron los mejores a chicote alzado ¿en qué momento te diste cuenta de que podían ser los campeones?
-Tuvimos una seguidilla de partidos (tres de visitantes) de los cuales ganamos dos, uno de ellos a Huracán donde le dimos vuelta el resultado por 3-2 (su equipo perdía 2-0), y el segundo fue un gran triunfo sobre Pedal (2-0), en tanto que al tercero lo perdimos con Atlético Pilares. Con el cuerpo técnico hablamos con el plantel y les dijimos que si conseguíamos al menos cinco puntos de esos nueve, podíamos pelear el título hasta el final. Se lograron seis, y ante dos grandes, lo cual nos dio un envión anímico para estar de festejos en estos momentos.
-¿Fueron justos ganadores del torneo?
-Por supuesto. Desde la tercera fecha empezamos a ser merecedores de este campeonato. Quizás no jugamos un fútbol vistoso, pero fuimos efectivos y ganamos más que el resto. Hubo partidos en los cuales, modestamente, jugamos muy bien y hasta los rivales nos felicitaron. Entonces eso habla de somos justos campeones. Te cuento un dato, en lo que va del año, incluido los partidos que jugamos por el Federal C, Rincón del Atuel solamente perdió cuatro partidos. Entonces creo que hicimos los méritos suficientes para ganar este título. Siempre intentamos jugar de la misma manera y ser protagonistas.
-Tres años y mismo cuerpo técnico ¿algo que no es muy común en nuestro fútbol?
-Son cosas que tiene este deporte, hoy te toca estar acá, mañana quizás te vas para otro club, o no entrenás por un tiempo. Seguramente que muchos entrenadores desearían tener a su gente de confianza en todo momento, hasta lo último, pero hay ocasiones en las cuales los asistentes son requeridos desde otras partes y obviamente que uno no les puede cortar esa libertad. Por suerte nuestro equipo de trabajo viene junto desde hace un tiempo y cada uno tiene muy marcado sus roles. Esa es otra clave del éxito. Nadie tiene más protagonismo que el otro.
-¿Cuál es tu modelo de entrenador y el sistema táctico que más te gusta?
-Pep Guardiola. Me gusta como plantea los partidos y porque hace mucha énfasis en la tenencia de la pelota. En cuanto al dibujo táctico, me inclino más por el 4-3-1-2.
Paolantonio comentó que el club hace rifas para solventar gastos y que a fin de año sorteará un auto. "Es gente humilde y muy trabajadora", señaló.
Un DT cuya profesión es ser peluquero
Cuando le tocó defender los colores de los equipos de la Liga Mendocina, Paolantonio, quien se desempeñaba como volante y hasta en alguna oportunidad le tocó jugar en la línea del fondo, empezó a estudiar peluquería y a perfeccionarse en lo que veía, una profesión a futuro. Fue así que cuando le tocó volverse a su San Rafael natal, en sus últimos pasos como futbolista, dedicó su tiempo a ser coiffeur, aunque su intención era seguir vinculado al mundo del fútbol.
"Hoy mi trabajo es ser peluquero y en los ratos libres, soy entrenador. Hice muchas especializaciones en peluquería cuando jugaba en el Deportivo Guaymallén y fueron tiempo difíciles, porque para estudiar y alquilar había contraído muchas deudas, entonces decidí regresar a San Rafael. Sabía que en la casa de mis padres no me iba a faltar el plato de comida ni tampoco tenía que pagar un alquiler. Puse la peluquería y no me quejo, porque tengo mucha clientela", comentó.
-¿Te gustaría dirigir por estos lares?
-Sería lindo tener esa oportunidad. Me gustaría volver a trabajar en Mendoza capital, si es con el fútbol, mejor, pero también podría trabajar en alguna peluquería como para no perder la técnica (risas).