Diego Dabove quiere apurar el trámite: es decir, no se excede en la exposición mediática, mide sus palabras y repite una y mil veces: “Sobre todo, se respetó al rival, no se canchereó, ni se hizo cosas raras. Acá no hay una diferencia así entre un equipo y otro”.
No se excede en la autocrítica ni en los halagos, pero reconoce que “se dio todo, un partido redondito pero atípico. No es normal esta diferencia y no existe tal entre un equipo y otro. Nos toca disfrutarlo, cenar y pegar la vuelta. Pero el martes (por mañana) a las 9.30 ya tenemos que estar con el cuchillo entre los dientes para seguir metiéndole. No queda otra. Estoy contento por el club, por la gente. Encaramos el final del torneo creciendo como equipo. Nunca imaginé estar 4 a 0 en media hora. Tenía la esperanza de hacer un buen partido ante un gran rival, pero nunca con esa diferencia” relata.
-¿Cuál fue la llave para abrir el triunfo?
- En principio la efectividad, después pudimos lastimar por afuera, por donde estaba el partido. También, en la seriedad, como se lo merece nuestro club primero y como se lo merece el rival; un grande como San Lorenzo. Lo fuimos a buscar siempre, nada de cancherear, ni hacer cosas raras.
-La diferencia con el puntero es de 7 puntos.
-Estamos ahí, hay que ir a buscarlo. El 26 de enero cuando se reanudó la Superliga estábamos afuera de todo, ni a la Sudamericana clasificábamos.
Primero queríamos meternos a esa copa, luego a la Libertadores, y ahora estamos golpeando otra puerta más. Pero siempre con humildad, con responsabilidad. Somos un plantel cortito repleto de jugadores del club y eso me pone feliz también.
-¿Cómo viste el trabajo de Báez, reemplazando a Viera?
-Brillante el trabajo general del equipo. Pero cada vez que recurrimos a Báez lo ha hecho de maravillas. Es un titular que le toca alternar en el banco.
-¿Hubo diferencia física a favor el Tomba por la acumulación de partidos del rival?
- Era algo que estaba hablado y se iba a notar en el segundo tiempo, después el resultado atípico del primero hace que se desvirtúe el partido. Pero más allá de lo físico creo que en lo futbolístico hicimos un gran partido.
-¿Cuál es la prioridad a partir de ahora?
-Sigue siendo crecer como equipo, y eso nos va llevando a escalar. Ahora a pensar en Temperley, que esta peleando el descenso y a todos los que hemos pasado por esa situación sabemos lo que es jugar así. Se pelea hasta la última pelota como lo hizo el sábado contra Lanús. Eso nos obliga a tomarlo con mucha seriedad.
-¿Alcanzaron el techo de rendimiento?
-No, más allá de este resultado, nos falta crecer. Nos falta porque hace solo 4 meses que estamos trabajando con este grupo. Hay un montón de chicos que necesitan más minutos en primera. Nos resta mejorar muchos aspectos del juego, pero obviamente que algo estamos haciendo bien, porque si no, no ganás cinco partidos seguidos.
-¿Cuánto facilitó la victoria los errores rivales?
-Si, la efectividad que tuvimos fue anormal. Las primeras tres veces que llegamos terminaron en gol. Salió el partido que habíamos pensado, y eso a veces no ocurre. Luego mantuvimos la intensidad y la seriedad. Estoy feliz también por el segundo tiempo porque lo seguimos buscando, ahora a seguir mejorando como equipo.
-¿Acertaste hasta en los cambios?
-Con los cambios buscábamos mantenernos y seguir siendo el equipo que somos. Pudimos sumar a Ramis, a Riolfo y Henríquez, que vienen trabajando muy bien.
-Hasta hace unos meses el nombre Dabove no tenía la repercusión que tiene ahora.
-Estoy tranquilo, sé como es esto en el fútbol y en la vida. Me pone contento pero no me cambia nada. Ahora llego y estoy con la familia y con los amigos de siempre. En el fútbol te vienen las buenas y en algún momento vendrán las malas. Hay que disfrutar el momento con los pies sobre la tierra.
