El astro argentino Lionel Messi confesó en la capital china, Beijing, donde realiza una breve gira comercial de dos días, que espera "poder clasificar al Mundial (Rusia 2018) con la selección", que hoy presentará al santafesino Jorge Sampaoli como nuevo director técnico.
El astro rosarino llegó al país asiático para presentar un impresionante parque temático dedicado a su figura y al fútbol que se inaugurará el año que viene en la ciudad de Nánjing, y aseguró que intentará "dar lo máximo con la camiseta de su país"
"Estamos con toda la ilusión y en proceso de clasificación al Mundial, esperamos llegar bien y competir de la mejor manera", deseó.
A pocas días de jugar un amistoso ante Brasil en Australia y ante un selecto público, Messi hizo delirar a sus fans chinas en uno de los salones del imponente hotel China World Summit Wing, pero evitó referirse concretamente a Sampaoli ante la pregunta de la poca prensa que estaba acreditada.
Cuando restan cuatro fechas para concluir las Eliminatorias Sudamericanas, el seleccionado argentino se ubica quinto, en zona de repechaje, con 22 puntos, detrás del ya clasificado Brasil (33), Colombia (24), Uruguay y Chile, ambos con 23. El 31 de agosto visitará a Uruguay y cinco días después recibirá a Venezuela, mientras que en octubre será local de Perú y cerrará con Ecuador en Quito.
Messi sí se refirió al nuevo DT del Barcelona, Ernesto Valverde, de quien dijo "es un cambio, no lo conozco. Nos conoceremos en los próximos días. El objetivo es volver a ganar todo".
Y sobre su futuro en el club catalán, el argentino, vestido de estricto traje negro y zapatillas blancas, dijo: "Los objetivos a comienzo de la temporada era ganar todo. El año que viene lo volveremos a intentar".
En tanto, aclaró, sobre la temporada que acaba de finalizar, que los jugadores de Barcelona querían ganar todo, pero "lamentablemente no fue así porque hay muchos equipos en ese nivel".
"Agradecido, sorprendido que quieran hacer este proyecto que me parece increíble la inversión que tiene. Ojalá la gente lo disfrute", dijo el crack argentino sobre el Messi Experience Park (MET), un moderno predio de 50 mil metros cuadrados que será construido en la antigua capital imperial china y que será el mayor parque temático dedicado al fútbol, a una estrella del deporte y a un sistema de entrenamiento.
Este proyecto, que será inaugurado en 2018, es una iniciativa del chino Phoenix Group y del catalán Grupo Mediapro junto a la firma Leo Messi Managament, que gestiona sus derechos, con el objetivo de "generar un espacio interactivo de fútbol", como dijo el presidente del grupo chino, Liu Weng.
Con "Messi es un partido que vamos a ganar", agregó su socio catalán, David Xirau.
Tras las firmas obligadas del millonario convenio para esta especie de Dineylandia del fútbol, Messi - fiel a su lacónico estilo- les aconsejó a sus seguidores chinos que jugar también requiere" trabajo, sacrificio, como en cualquier ámbito de la vida".
Los fans de Messi en China son millones, la sola mención de la palabra "Argentina" remite a su nombre. Y ya en las inmediaciones del céntrico hotel, esa pasión se hacía sentir con camisetas del Barcelona y de Argentina, indistintamente.
En ese sentido, el embajador argentino en China, Diego Guelar, presente en primera fila durante el acto, sostuvo que la presencia de Messi también se da en el marco del convenio de cooperación futbolística firmado durante la última visita del presidente Mauricio Macri en China, el pasado 17 de mayo.
"Messi es un extraordinario embajador de la Argentina en el mundo y su presencia de hoy viene a coronar el proceso de reforma y desarrollo del fútbol auspiciado por el presidente chino Xi Jinping, que cuenta con plena colaboración de la Argentina", dijo Guelar.
"Creemos que Messi es una figura central en China, donde el fútbol se ha convertido en una verdadera pasión y cuya selección nacional, en el mediano plazo, estará en la lista de las mejores del mundo, junto con Argentina", destacó en diálogo con Télam.
En el marco de esta presentación, Messi también tuvo la oportunidad de saludar a dos jóvenes jugadores de fútbol chino, de 12 y 14 años, que llegaron desde un humilde y pequeño poblado llamado Nantai, en la provincia de Huanam, en el centro del país.
Los chicos le llevaron flores y Messi regaló fotos y sonrisas. "Estoy tan emocionado que no me puedo expresar, estoy sin palabras", llegó a decir Wu Jilong, uno de los chicos, ataviado con la camiseta del Barcelona, que se reía de nervios con su compañero Wu Jianping.
Quien acompañaba a los pibes era su maestro, Zheng Zhong, que sostuvo a Télam que Messi "trae el sueño del fútbol como elemento para salir de condiciones duras y para poder tener una vida feliz".
Jóvenes de Beijing deliraban por una foto con su ídolo quien, amable y sonriente, se sacó fotos y firmó camisetas.
Al final, desde su club de fans, las chicas le preguntaron cuándo se iba a afeitar la barba. "No sé, por ahora, estoy bien", zanjó a media sonrisa el hombre más amado de China por estas horas, que llegó muy bien custodiado por su padre y su hermano, Agustín.
Luego de su paso por China, Messi marchará rumbo a Australia para sumarse a los entrenamientos de Sampaoli con la selección argentina. Jugará contra Brasil el próximo 9 de junio en Melbourne y el 13 de este mes contra Singapur, en ese país.