El incremento del dólar en mayo ha dejado consecuencias en los sectores productivos de Mendoza. Uno de los más afectados es el de la construcción, que generalmente es el primero en reaccionar a los vaivenes económicos.
Tal es así que empresas del sector de la construcción mencionaron a Los Andes que se han frenado algunas obras, otras que estaban por empezar no lo hicieron, y aquellas que estaban ya en camino se han ralentizado. Del lado de la demanda la situación es la misma, ya que muchos compradores que estaban cerca de cerrar la compra de un lote, una casa, un departamento ya construido o en pozo, decidieron esperar hasta que la situación este más clara.
Eduardo Martín, titular de la Cámara de Desarrolladores Inmobiliarios de Mendoza, mencionó que las ventas están estancadas y no tienen la fluidez de hace unos meses atrás.
“Cuando hay subas significativas del tipo de cambio, los desarrollos y operaciones tales como venta de terrenos, casas y departamentos, se enfrían. Se observa una situación de cierto freno en las consultas de los clientes. El que vende quiere mantener el precio en dólar, y el que compra, le afecta porque necesita más pesos para comprar los mismos dólares”, detalló.
El titular de la Cámara señaló que esta situación se observa principalmente en aquellas viviendas o terrenos destinados a la clase media, como a los que se accede por medio de créditos UVA, debido a que "el monto financiable del banco se hace insuficiente".
Sin embargo, un punto en el hizo hincapié Martín es que a pesar de esta situación y de los incrementos de costos, en general las obras continúan su curso. A pesar de ello aclaró que ante la expectativa de una economía que se enfría, es probable que se ralenticen las inversiones.
Para el empresario Juan Manuel Giménez Rilli la situación externa no le hace bien a un sector que responde inmediatamente a los vaivenes del dólar. Según observó, se ha vuelto a operaciones como las que se gestionaban con el Gobierno anterior.
"Por el temor y la inestabilidad económica los plazos con los que estamos trabajando ahora son más cortos que los de hace un mes atrás. Para ejemplificar: cuando nosotros comprábamos hierro, asfalto o cemento, pagábamos con cheques a 60, 90, 120 y 150 días. Hoy esto es inviable, por lo que el máximo con suerte son 60 días. Así es que nosotros hacemos lo mismo con nuestros clientes. Antes vendíamos un terreno con un plazo de 24 meses o 36 meses, hoy lo hacemos en periodos cortos de 10 a 12 meses", explicó Giménez Riilli.
Lo mismo que sucede con aquellos desarrollos privados enfocados a la construcción de barrios privados, o propiedades horizontales, ocurre con empresas que apuntan a obras privadas enfocadas en inversiones de ampliación de compañías de Mendoza y de diversos sectores.
Por ejemplo, el ingeniero Jorge Perelló, uno de los titulares de Perelló - Siri S.A, contó que las empresas han frenado presupuestos. "Ante el incremento del dólar, el aumento de las tasas, y la turbulencia económica, hay clientes que prefieren no avanzar hasta que se estabilice el panorama. Las empresas medianas y chicas han parado las reformas y otras han decidido hacerlo en un plazo más largo del proyectado inicialmente".
Luis Rico, del estudio de arquitectura Clement & Rico y de empresas de desarrollo Ecolodge, opinó lo mismo y detalló que se ha frenado la entrega de algunas viviendas porque la suba del dólar aumentó su valor y ahora se deben renegociar el precio.
En el caso de obras privadas, enfocadas a viviendas familiares, Rico contó que "ante las suba de materiales hay clientes que han decidido frenar la obra y avanzar de a poco, ya que no pueden costear los incrementos. Cabe indicar que esto sucede principalmente en aquellas casas de clase media, mientras que en viviendas de clase alta esto no sucede, porque por lo general el propietario no depende de la cotización o los vaivenes y no está atado a un crédito".
En lo que respecta a departamentos en pozo, el empresario detalló que sucede lo mismo y hay obras que no avanzan al ritmo que lo venían haciendo. "Algunas obras se han ralentizado y otras se frenan por el incremento de costos. Las cuotas de este mecanismo aumentaron. Por ello el sistema ha perdido cierto interés y algunos deciden retirarse", contaron.
Aumentan los materiales
Las empresas proveedoras de materiales de construcción aumentaron insumos relacionados directamente con el dólar, como el cemento, el hierro, la grifería y los productos eléctricos, entre otros, pero también subieron aquellos que no están tan relacionados con el tipo de cambio. “Las empresas aprovechan y corrigen precios”, enfatizaron con cierto enojo empresarios del sector.
Jorge Perelló contó que durante mayo aumentaron dos veces algunas listas de materiales, como es el caso del cemento, que durante mayo escaló 12%. Lo mismo sucedió con el hierro y la membrana. No obstante ello, el empresario aclaró "en general los materiales para la construcción subieron entre 7% y 15%".
El problema radica -según explicó el ingeniero- en que estos valores muchas veces no se pueden actualizar. "Hay obras que estaban por empezar y ya nos habían hecho un depósito financiero. A veces no se reconoce la diferencia monetaria por los aumentos a y las empresas terminamos teniendo un margen de rentabilidad mucho más bajo. Es el riesgo que muchas veces asumimos", comentó.
Luis Rico coincidió con ello y detalló que algunos materiales han subido mucho más de un 15% en las últimas tres semanas, como por ejemplo el pvc para hacer deck, porcelanatos, rollizos y aluminio, entre otros. "En nuestro caso, por más que el contrato este firmado, yo debo transmitirlo al cliente y aumentar el valor del producto -vivienda, casa- que estoy vendiendo, aunque eso signifique que se enfríe la venta", detalló.
Otra problemática que planteó el empresario es que ante los constantes movimientos del dólar, las compañías proveedoras de materiales de construcción frenan pedidos y envían lo justo y necesario a cada uno de sus clientes. "Aluden que están corrigiendo el valor de reposición. Buscan este artilugio para ir aumentando a medida que actualizan listas", expresó Luis Rico.
Desde la Cámara de desarrolladores también plantearon esta problemática y mencionaron que ante una inflación en escalada, en el corto plazo llegará otra actualización de los salarios de mano de obra, lo que impactará en el costo de construcción.
En marzo creció 6,6% el empleo en el sector
Según el informe de coyuntura de la construcción elaborado por Ieric, en marzo pasado se contabilizaron 13.462 trabajadores activos en Mendoza, mostrando una variación interanual de 6,6%. En tanto, la situación salarial también es positiva respecto al año pasado, ya que el sueldo promedio es de 15.954 pesos, mostrando una variación de 26,8% respecto a igual mes del año pasado.
A nivel país, de acuerdo a la información aportada por esta entidad, se registraron 426.454 puestos de trabajo en la industria de la construcción durante marzo, lo que supone un incremento del 2,3% en relación a febrero último. Esto representa la creación de 9.600 puestos de trabajo en el tercer mes del año.
A su vez, el ritmo de expansión mensual verificado en marzo de 2018 configura uno de los más elevados de la serie histórica para dicho mes, superado únicamente por lo sucedido en iguales meses de los años 2017 y 2015.
Además, la cantidad de puestos de trabajo registrados en el sector de la construcción durante marzo de 2018 se ubicó un 6,5% por sobre la media correspondiente a igual mes de cada año.
En tanto, la comparativa interanual arrojó un incremento del 7,9% respecto al mismo mes de 2017, lo que si bien constituye un significativo ritmo de expansión, se mantiene dentro de la tendencia de desaceleración verificada en los últimos meses. La creación de nuevos puestos de trabajo tuvo como causa principal la ampliación de los planteles de las firmas constructoras ya existentes.
En el primer trimestre completo se registró una media de 419.532 puestos de trabajo registrados en el total de Argentina, marcando un incremento del 9,4% interanual.
En el informe del Ieric, que también consigna el empleo por firma, explica que este índice continuó en expansión y alcanzó el nivel de 14,6 puestos de trabajo por firma constructora, marcando un incremento del 1,7% mensual y del 6,7% interanual a nivel país.