La fiscal de Homicidios Claudia Ríos, detuvo este viernes en la tarde a Nicolás Gil Pereg, hijo de una de las dos ciudadanas israelíes que desaparecieron hace dos semanas en Mendoza. Este sábado, fue imputado por homicidio simple y homicidio agravado por el vínculo luego fue alojado en la penitenciaría de Boulogne Sur Mer. Realizan nuevos allanamientos en la casa del sospechoso y en el cementerio. Una mancha de sangre en su remera, la clave para destrabar la causa.
El Ministerio Público Fiscal indicó este viernes que se habían reunido “nuevas medidas de pruebas” en medio de un total hermetismo en la intrincada causa. Este sábada pasadas las 11, Ríos dio detalles y comentó que una mancha hemática en la remera del ahora imputado correspondía con una de las víctimas.
La madre del acusado, Pyrhia Sarusi (63), y su tía Lily Pereg (54), son buscadas desde hace dos semanas y la última persona que las vio fue él. Por eso, Policía Científica se encuentra en la vivienda de Nicolás Pereg ubicada en calle Julio Argentino Roca al 6.000 para continuar con los allanamientos.
Una de las pruebas que se supo que reunió la Unidad Fiscal de Homicidios fueron las imágenes captadas por cámaras en la zona donde vive el ahora imputado. Los videos mostraban al hombre y a su familiares la mañana del sábado 12 de enero cuando se supone que llegaron a la propiedad, como efectivamente había declarado el sospechoso.
Pero en su relato agregó que las mujeres pasaron allí todo el día y salieron del predio alrededor de las 21 para subirse a un colectivo que las llevaría al departamento que habían alquilado en calle España de Ciudad.
Las cámaras del cementerio ubicado frente a la casa del excéntrico ingeniero en electrónica registraron que, efectivamente, por la mañana pasaron por el frente las tres personas. Pero a las 21 las cámaras nunca tomaron a las hermanas realizar el recorrido descripto por Gil Pereg.
Quién es Nicolás Pereg
El hombre es un ex militar de Israel que, curiosamente, realizó la denuncia de paradero. El interrogatorio en la investigación antes de la detención fue riguroso y extenso. Él aseguró que compartió la jornada de aquel sábado 12 de enero con las mujeres, hasta que ellas se tomaron un colectivo para volver a un departamento en calle España, de Ciudad, una versión que nunca cerró del todo.
El perfil de Pereg es más que llamativo. Figura como titular de cinco empresas en Mendoza creadas por su madre, Pyrhia Sarusi, quien reside en Israel. Sin embargo, los movimientos financieros no coinciden con su estilo de vida, al borde la indigencia, a la par de mantener deudas por 9 millones de pesos.
El sujeto tenía un arsenal de armas, pero todas registradas. Se habla de un total de 42 de puño (pistolas y revólveres).
También se destaca la obsesión de Gil Pereg por la seguridad en el predio donde reside, que, vale destacar, carece de cama, baño, cocina y electricidad. En cambio sí hay cámaras en permanente monitoreo.
