Se llama Rodrigo Navarro, tiene 29 años y desde hace 4 años padece esclerosis múltiple. El lunes pasado hizo cumbre en el coloso de América, en una expedición que duró casi dos semanas.
Bajo el lema “La Salud en lo más alto”, Rodrigo realizó el desafío en 11 días (más 3 días de descenso). Y si bien el grupo del que formó parte lo comprendían 22 personas de diferentes partes del mundo, sólo 7 (incluido Rodrigo) lograron hacer cumbre luego de 15 horas de ascenso.
Después de un arduo entrenamiento y de su experiencia como instructor en Penitentes, el joven destacó: “La preparación requiere de mucha resistencia, trabajé la adaptación en altura, de una manera progresiva. Además la edad, el deporte y la buena alimentación contribuyeron para alcanzar este objetivo”.
Sobre su enfermedad, que le dejó secuelas en la visión, pérdida de sensibilidad y vértigo, Rodrigo expresó: “Como en todas las cosas uno puede sobrellevarlas bien o mal. Yo opté por llevarla de la mejor manera y devolverle la esperanza y fuerza a todos los que me acompañaron cuando me la diagnosticaron”.
La esclerosis múltiple es una enfermedad consistente en la aparición de lesiones desmielinizantes, neurodegenerativas y crónicas del sistema nervioso central. Actualmente se desconocen las causas que la producen aunque se sabe a ciencia cierta que hay diversos mecanismos autoinmunes involucrados. Debido a sus efectos sobre el sistema nervioso central, puede causar una movilidad reducida e invalidez en los casos más severos.