El virus transmitido por el mosquito Aedes aegypti ya circula en varias provincias de nuestro país, dado el aumento de casos autóctonos (transmisión local) que se suman a los casos importados reportados en los dos primeros meses del año.
En este contexto epidemiológico, se recomienda mantener conductas de protección personal para evitar el contacto con mosquitos, tales como usar repelentes en horas de la mañana y al atardecer (momento en que la actividad de picada de los mosquitos aumenta), aislar la vivienda con mosquiteros en puertas y ventanas y usar pastillas y/o soluciones insecticidas en los ambientes para evitar el ingreso de mosquitos.
“El Aedes aegypti es un mosquito doméstico muy bien adaptado al hábitat humano, por lo que las medidas de prevención y control comienzan eliminando los criaderos que se encuentran en los espacios del peridomicilio y ambientes interiores”, destaca Manuel Espinosa, responsable del área de enfermedades transmitidas por mosquitos de la Fundación Mundo Sano.
Evitar la acumulación de agua por más de 5 días en recipientes, neumáticos, depósitos, lonas, platos o bandejas bajomacetas; realizar el mantenimiento correspondiente de las piletas de lona o plástico, limpiar canaletas, bocas de desagüe y resumideros de los patios y mantener tapados los depósitos de almacenamiento de agua son actividades que deben constituirse en una rutina diaria de la comunidad por lo que se aconseja reforzarlas luego de los días de lluvia para evitar la presencia de criaderos en las viviendas.
El virus del dengue se transmite a las personas a través de la picadura de mosquitos hembra infectadas. Las personas afectadas, sintomáticas y asintomáticas, son las portadoras y multiplicadoras principales de los virus, y los mosquitos se infectan al picarlas.
Ante la presencia de síntomas como fiebre elevada acompañada de dolor de cabeza muy intenso, dolor detrás de los globos oculares, dolores musculares y articulares, náuseas, vómitos y agrandamiento de ganglios linfáticos o salpullido, es importante consultar a un médico y no automedicarse. “Si bien no hay tratamiento específico del dengue ni del dengue grave, la detección oportuna y el acceso a la asistencia médica adecuada disminuyen las tasas de mortalidad”, afirma Espinosa.
Fuente: Mundo Sano