Los gigantes quedaron cara a cara bajo los 33 grados sofocantes del cemento estadounidense. Por los cuartos de final del último Grand Slam del año, Juan Martín Del Potro (3° del ranking ATP) llegaba con viento a favor a una escala exigente contra el local John Isner (11°).
Sólido y sin haber cedido un set en sus cuatro presentaciones anteriores (era el único de los ocho tenistas que llegaban a esta instancia en conseguirlo), el tandilense había gastado poca energía en el torneo, algo muy valorable para afrontar el calor que tanto perturbó a los tenistas.
Pero enfrente estaba un especialista en canchas duras, dueño del mejor servicio del circuito: Isner registra la mayor efectividad en la temporada y es el líder en aces en esta edición del US Open. Y un rival que obliga a agudizar la paciencia.
Por eso no llamó la atención el arranque del juego, con ambos sosteniendo el juego desde su servicio. Alcanza con un dato para graficar el trámite: en apenas 16 minutos se jugaron los primeros cinco games: fueron al primer descanso con el marcador 3-2 para el local y sin ninguna chance de quiebre.
La primera chance de quiebre fue para Delpo con el partido igualado en 5 y después de 40 minutos de juego. Encima Isner falló su primer servicio con un saque centrado que se fue apenas ancho. Por eso el tandilense se le fue encima en busca de esa ansiada chance: se metió en la cancha para tomar la iniciativa en el segundo servicio. Pero no pudo. El saque alto del estadounidense obligó a un revés incómodo que quedó flotando del otro lado de la red. Isner ganó el punto con una derecha invertida. Y otra vez a seguir batallando. Directo al tie break.
El número 58 de Isner en el año, lo que marca un rasgo distintivo en el juego del gigante número 11 del mundo, acostumbrado a juegos de largo aliento. Y en el desempate estuvo más fino. Supo meterse en la cancha cuando Del Potro falló su primer servicio, se aferró a un mini quiebre y se llevó el primer set 7-6 (5). El primero que cedió el argentino en el torneo.
En el segundo set empezó a romperse la estructura del juego. Isner volvió a usar el comodín de su saque cuando estuvo en apuros (ace para salvar un quiebre en el segundo juego) y Delpo de a poco soltó más su derecha, el famoso martillo que cuando sale limpio no encuentra resistencia.
Ya no llevaban la contundencia de antes los saques de Isner. Entregó otras dos chances quiebre en el cuarto juego. Hasta que finalmente su drive de sobrepique se fue ancho. Y por primera vez el argentino tomó las riendas del tanteador. Ahora están 1 a 1 y empieza otro partido. Isner parece estar sintiendo los efectos del calor.
El tercer set volvió a ser un concierto de saques, los que llevaron la definición a un nuevo tiebreak y ahora sí el argentino se movió con más inteligencia para pasar a estar 2 a 1 arriba y a un set de convertirse en semifinalista.
Ese andar positivo se ratificó en el comienzo del cuarto set, cuando el argentino quebró en el segundo game. Por como se había dado el partido hasta ahí, sin breaks a favor del estadounidense, parecía una diferencia muy difícil de descontar.
De golpe aparecieron algunas dudas en Del Potro, que después de haber desaprovechado un doble break point que prácticamente liquidaba el partido en el cuarto game, cometió dos dobles faltas en el juego siguiente que lo pusieron contra las cuerdas. Pero también de eso salió indemne y consiguió conservar el saque.
Fue la sentencia para Isner, que ya sufría el partido. Y en el octavo game, con un nuevo quiebre, Del Potro consiguió el 6-2 definitivo para ratificar que es uno de los más grandes del tenis actual. Su tenis le da alas para soñar con todo y creer que su segundo Grand Slam es posible. Ya solo le quedan dos pasos más.
El tenista argentino, campeón del US Open 2009, tiene un historial favorable de ocho triunfos contra cuatro de su rival. En lo que va de 2018 hubo entre ambos tres enfrentamientos: el primero fue para Isner en semifinales del Masters 1000 de Miami por 6-1 y 7-6 (2), mientras que el segundo fue para Del Potro tras ganar en octavos de final de Roland Garros por 6-4, 6-4 y 6-4 a lo que hay que sumarle el de hoy.