Según se ha informado, la premisa para confeccionar las declaraciones juradas fue que los integrantes del Ejecutivo entregasen datos de sus bienes patrimoniales y de la conformación familiar. Pocos funcionarios de primera y segunda línea dieron detalles de su composición familiar. Y, como en otros aspectos, no hubo criterio uniforme.
De hecho, el gobernador Alfredo Cornejo sólo presentó a su hijo menor, Lautaro, de 22 años, quien declaró ingresos por $ 25 mil (de su actividad comercial), además de capitales invertidos en tres firmas dedicadas a distintos rubros comerciales. Posee también un auto Fiat Strada Adventure con valor de $ 180 mil prendado.
Pero Cornejo no presentó a su hija Constanza, de quien se informó que ya “no vive con la familia”. Según el entorno del mandatario, “esa fue la razón” de la omisión.
Distinta actitud tomó la vicegobernadora, Laura Montero, que sí declaró a sus dos hijas, Agostina y Martina. Ambas jóvenes presentan un patrimonio casi idéntico. Cada una posee 33,3% de una casa valuada en unos $ 25 mil; 16,7% en otra con avalúo fiscal de $ 12.500; 33,3% en “otro” inmueble tasado en $ 1.260 y 11,11% en un lote con valor de apenas $ 12,44.
En todos los casos, la fecha de adquisición es el 10 de octubre de 2006, “la fecha en que se concretó la herencia que les dejó su padre”, explicó la Vicegobernadora a este diario. Sólo Agostina tiene auto, un VW Gol 2013, valuado en $ 61.100.
El criterio de incorporar a los hijos en la declaración jurada también varió en el caso del ministro de Salud, Rubén Giacchi. Es que hubo quien dijo que “los menores de edad” no debían ser incluidos. Sin embargo Giacchi sí los incluyó en la declaración. Así, se supo que Joaquín y Victoria, ambos menores de edad, son dueños, cada uno, del 50% de un departamento valuado en $ 190.700. Desde el Gobierno dieron a entender que se trata de un “adelanto de herencia”, aunque no hubo confirmación oficial.
Finalmente, el otro funcionario de primera línea que incluyó a una de sus hijas en la declaración jurada fue el ministro de Economía, Enrique Vaquié. Sofía tiene un VW Gol 2015, valuado en $ 180 mil.